Fue una madrugada agitada en Santa Fe. En las primeras horas del miércoles dos negocios fueron vandalizados por distintos grupos de personas que rompieron estructuras y robaron.
Del primer hecho se tuvo conocimiento poco después de la medianoche cuando la Central 911 recibió un llamado dando cuenta que cuatro hombres en un automóvil color gris o blanco habían ingresado a una distribuidora, ubicada en Aguado 2300), desde donde sustrajeron varias bebidas.
De inmediato personal de la Policía Comunitaria tomó cartas en el asunto e inició la búsqueda de los implicados. Minutos después se avistó un automóvil color gris en circulación, lo que llevó a la decisión de interceptarlo.
Con señales lumínicas, sonoras y balizas, se detuvo un Ford K color gris que circulaba de norte a sur por calle Aguado. El conductor del vehículo intentó evadir a la policía haciendo una marcha atrás por pasaje Falucho en dirección oeste.
En respuesta, se efectuó un disparo de escopeta reglamentaria con cartuchos AT (postas de goma) como medida de detención. La requisa del automóvil y de los ocupantes, con el permiso del dueño del vehículo, un hombre de 52 años, no arrojó resultados positivos en cuanto a elementos sustraídos o peligrosidad.
Durante el procedimiento, el propietario del automóvil señaló daños en la puerta lateral izquierda trasera de su vehículo. Se le solicitó presentarse en la sede policial para realizar las actuaciones correspondientes.
A la 1,30 se estableció comunicación con el departamento Judiciales para informar sobre los acontecimientos. Luego se contactó al fiscal en turno, Dr. Filipi, quien dispuso que los oficiales involucrados dejaran constancia detallada de los hechos y elevaran las actuaciones a Fiscalía.
En el negocio se constató la falta de aproximadamente 14 bultos, mayormente conteniendo bebidas alcohólicas, que habrían sido sustraídos del comercio.
En Barranquitas
Un rato después personal de la Policía Comunitaria fue comisionado por el 911 a calle Ecuador 3800 en respuesta a un intento de saqueo en un frigorífico.
En el lugar se constató que el local comercial "Ubiergo de Negrete Hermanos SRL" tenía la vidriera rota y se encontraba una barreta de hierro junto con varios ganchos tipo carnicero esparcidos en la vereda. Además, se sospechaba de la posible faltante de productos embutidos.
Durante el procedimiento, el propietario del comercio, un hombre de 51 años, se presentó en el lugar y confirmó ser la víctima del incidente. Manifestó su intención de acercarse posteriormente a la comisaría por sus propios medios para brindar más detalles y formalizar la denuncia correspondiente.
Las circunstancias del hecho quedaron registradas en el informe policial comunicando todo lo acontecido al fiscal en turno.
Vigilancia especial
Cabe agregar que en virtud de hechos similares ocurridos en distintos puntos del país, la policía santafesina recibió instrucciones para realizar una vigilancia especial, sobre todo a negocios dedicados a la venta de comestibles y bebidas y supermercados.
La tarea consiste en patrullajes preventivos en las cercanías de dichos comercios, como así también se efectúan tareas de inteligencia en redes sociales para rastrear a presuntos instigadores.
Con información de El Litoral