Lideraba un grupo de personas que ofrecían planes de ahorro y venta de vehículos a clientes, pero el dinero no aparecía nunca.
En una audiencia realizada este viernes por la mañana en el Centro de Justicia Penal de Rosario, el fiscal Fernando Dalma imputó a Alexis Guarda por asociación ilícita y estafas reiteradas por abuso de confianza y amenazas simples.
Guarda era una de las caras visibles y jefe de un grupo de vendedores de autos de concesionarias que operaban en la ciudad de Rosario y Santa Fe bajo la figura de cooperativas.
Luego de varias denuncias se concluyó que habían cometido distintas estafas y perjudicado a más de 70 personas que intentaron comprar autos por medio de entregas de dinero o dejaron sus autos en consignación para la venta y nunca recibieron el dinero. De las denuncias sólo se tomaron 58 en la audiencia
El fiscal Dalma le atribuyó a Alexis Guarda los delitos en carácter de jefe en concurso real como coautor de estafas en relación a 58 hechos y por amenazas calificadas por uso de arma en carácter de coautor y encubrimiento agravado. El juez Alejandro Negroni hizo lugar al pedido de la Fiscalía y dispuso la prisión preventiva hasta la realización de la audiencia preliminar, un tiempo que puede variar entre 6 meses y un año. Al imputado además se le sumó la inhibición de sus bienes.
Estafas con nombre Falso
Los hechos se remontan, según Fiscalía, al menos a diciembre de 2023. Guarda, quien se hacía llamar "Rodrigo Dipp" o "Rodrigo Dipporio", fue imputado de haber formado una asociación ilícita. Durante la investigación ya fueron imputados Andrés Alarcón, Camila Mendoza, Roberto Pereyra, Walter Ríos, Nelson Ugolini, Maximiliano Hernán Alarcón, Leandro Jaquet, Camila Antonela Davila, Diego Alberto Gordillo y Fernando Ortellado. Algunos de ellos trabajaban en la agencia de autos de Pellegrini y Francia (Rosario), donde el caso cobró notoriedad luego de una manifestación de damnificados en la puerta del local. Otros realizaban tareas en las agencias de Pasaje Independencia al 3200 y en Pellegrini al 4800 (Rosario).
Para el fiscal Dalmau, la organización montó agencias de autos que eran utilizadas como fachadas, e inducía a entregar a los clientes sus vehículos y dinero, tomando el rodado usado a valor de mercado. En la maniobra, los interesados dejaban fotocopias de la documentación del rodado y de su DNI. Pero la agencia disponía de los automóviles para fines no aprobados por sus dueños y se apropiaba de lo obtenido, "siendo en muchos casos sumas considerables de dinero en efectivo que redundaban en beneficios de los integrantes de la asociación ilícita".
Compraventa de autos
El fiscal indicó en sus argumentos que, en otros casos, los clientes daban sus vehículos y suscribían un contrato de compraventa de automotor en el que se detallaba la forma de pago, el rodado que entregaba, una suma de dinero en un crédito prendario, y un monto restante que se entregaba por transferencia bancaria, pero después no recibían ni el auto ni la plata.
El aparente jefe de la organización fue acusado hace dos semanas por una ingeniería delictiva similar, pero ejecutada en la ciudad de Santa Fe bajo el nombre comercial de "Vendo tu auto". Según ese expediente, a cargo de las fiscales María Gabriela Arri y María Lucila Nuzzo, esa asociación ilícita tenía una estructura piramidal y montó locales como agencias de autos, que eran utilizadas como fachada, en las que las víctimas entregan los vehículos, el dinero y la documentación. Luego, el personal de esos lugres disponía de los vehículos para fines no aprobados por sus dueños y se apropiaban de lo obtenido.
Roles e integrantes
Los integrantes de la asociación ilícita se contactaban vía Facebook, desde la plataforma de Marketplace o por redes sociales, con personas que publicaban la venta de su automóvil usado. Con el fin de captarlos manifestándoles que estaban interesados por el vehículo, les decían que se apersone en la concesionaria a negociar el precio, que tenían compradores y con ello les hacían suscribir contratos de consignación y le solicitaban la entrega del rodado con su documentación y fotocopia del DNI, suscripción del Formulario 08. En ocasiones los imputados retiraban rodados de la concesionaria sin autorización de los propietarios y al utilizarlo infringían normas de tránsito, y en ocasiones llegando a que personal de transito secuestrara el rodado, remitiéndolo luego al corralón municipal, generando una importante deuda de dinero por la multa en cabeza de la víctima, y el consiguiente perjuicio económico.
Los imputados tenían diferentes roles: Camila Mendoza integró la asociación ilícita y se presentaba como presidenta y/o representante de una de las cooperativas de avenida Pellegrini al 3100. En tanto Andrés Alarcón y Walter Ríos cumplían los roles de vendedores y recibían dinero y depósitos, además de ofrecer vehículos sabiendo que no iban a ser entregados.
El exempleado del Ministerio Público de la Acusación en la fiscalía de Rosario, Nelson Ugolini, se desempeñaba como el abogado en la organización, quien proporcionaba el andamiaje jurídico para perpetrar las maniobras, concreción de los documentos y conformación de las cooperativas. "Han amenazado, amedrentado, intimidado y atemorizado a víctimas que reclamaban a la concesionaria de autos". Por su parte Maximiliano Alarcón era quien captaba por Marketplace o por redes sociales con personas que publicaban la venta de su auto usado.
Leandro Jaquet era vendedor de vehículos, atendía al público y negociaba recibiendo las transferencias bancarias. Diego Alberto Gordillo integraba la asociación ilícita en carácter de miembro y vendedor de vehículos, al igual que Fernando Ortellado Rodríguez. Según la Fiscalía, todos ellos reportaban a Alexis Guarda en una estructura piramidal.
Fuente: Diario Uno