La provincia de Santa Fe contará, antes de fin de año, con la vacuna contra el dengue. Lo confirmó la ministra de Salud de la provincia, Sonia Martorano, quien, además, advirtió sobre su uso: sólo es preventivo. ¿Quiénes podrán colocársela?

“Por el cambio climático, tenemos que estar preparados. Antes teníamos brotes de dengue cada tres años. Y este año seguramente vamos a tener y esperamos tener muchos casos, por eso tenemos que trabajar en la prevención”, sostuvo la funcionaria.

En la misma línea, hizo hincapié en el rol de los ciudadanos. “La cuestión de la prevención (descacharrados, limpieza de desagües, etc) es un tema de las comunas y los municipios, pero también familiar. Hay que sacar de los patios y los espacios abiertos todo lo que contenga agua. Es un trabajo que no se termina de realizar”, dijo.

En cuanto a la vacuna, Martorano explicó que no se puede colocar a personas embarazadas o en etapa de lactancia, a los menores de cuatro años y personas con enfermedades autoinmunes. “Había alguna duda sobre si se podría usar en aquellos que ya habían tenido dengue. Ahora se determinó que se le puede aplicar a cualquiera, haya tenido o no dengue”.

La titular de la cartera sanitaria santafesina también precisó que se trata de dos dosis. La segunda se coloca a los tres meses de la primera.

“Se está definiendo si la vacuna va a ser para todo el país o solo para algunas regiones, donde pueda haber endemia o mayor cantidad de casos. Santa Fe seguramente estará contemplada”, dijo la funcionaria y a la vez que aclaró que “no sirve para brotes, Es para usar preventivamente”.

Al ser consultada sobre la llegada de las vacunas, Martorano admitió no tener novedades.

Covid, gripe y resfríos

Por otro lado, la ministra de Salud se refirió a la temporada de resfríos y gripes que se aleja y la de alergias que está llegando. Además, reiteró que el Covid “llegó para quedarse”.

“No tuvimos un inverno crudo, se fue mechando con días de calor y eso no colabora. A veces estamos muy abrigados, otras veces no. La temperatura hace que se sequen las mucosas y eso hace que nuestro aparato respiratorio sea más sensible, más frágil y es más fácil que los virus penetren”, explicó la experta en salud.