Estela de Carlotto confió que sintió "una frialdad bárbara" durante el reencuentro de Cristina Kirchner y Axel Kicillof, que se dio en el acto por los 47 años de Abuelas de Plaza de Mayo. "Se notaba, no hablaban entre ellos, parecen dos chicos a veces", agregó la titular de la entidad.
La distancia entre ambos dirigentes peronistas se generó a raíz de las próximas elecciones internas del partido, dado que el gobernador bonaerense mantiene una posición de neutralidad que molestó a la expresidente, que competirá en las urnas con Ricardo Quintela.
"No se hablaron, parecía una pareja con la vieja loca en el medio", insistió Carlotto, aunque aclaró que "se respetaron muchísimo" y "disfrutaron" del evento.
Con respecto al comportamiento del público presente, la referente de Abuelas consideró que "se animó a decir lo que quería decir" y que sólo hubo un grupo más ruidoso "apoyando más a cristina".
"Son leyes políticas que no ofenden a lo que nosotros hacemos y queremos. Yo personalmente los quiero y los aprecio a los dos muchísimo", concluyó.
La entrada de ambos al imponente teatro platense fue una escena particular. Kirchner ingresó al frente del grupo, seguida por Carlotto y por Kicillof. En ese momento, los seguidores de la exmandataria impusieron su cántico de "Cristina presidenta".
La exjefa del Estado y quien fuera su ministro de Economía se sentaron con la dirigente humanitaria de por medio en la primera fila, que completaron Taty Almeida, el senador Eduardo "Wado" de Pedro y la vicegobernadora bonaerense, Verónica Magario, entre otros. Salvo el beso impostado que se dieron al principio, no intercambiaron ni miradas ni palabras.
La tensión que flotaba en el ambiente decreció cuando empezó el acto, que estuvo conducido por los nietos recuperados Manuel Gonçalves y Leo Fossati, quien lanzaron un guiño: "Cuando estamos juntos, nada es imposible, como lo demostraron la Abuelas".
Fuente: El Canciller
