La letra del proyecto de ley de Presupuesto Nacional del año próximo, enviado por el ministro de Economía Sergio Massa, no contiene dos artículos, que hoy están vigentes, y benefician a las provincias que la década de los ’90 no transfirieron sus cajas de jubilaciones al Estado Nacional y por lo tanto deben ser compensadas para enfrentar sus respectivos déficits.
Se trata de los puntos 92 y 93 que, actualizaciones y plazos mediante, cuidan que la devaluación de la moneda no dañe las compensaciones mencionadas. En la discusión del la ley de cálculos y recursos vigente ambos fueron agregados gracias a negociaciones que iniciaron diputados nacionales por Córdoba a los que se sumaron sus pares santafesinos opositores, en especial del Interbloque Federal. En esa pulseada con el oficialismo se acordó que hubiera mecanismos de actualización (de una tasa similar a la que se usa para los haberes previsionales nacionales) y el cumplimiento de pautas para que se produzcan los giros nacionales.
Ahora ambos aspectos no están contemplados para 2024. En diciembre de 2023 asumirán el radical Maximiliano Pullaro en Santa Fe y el justicialista Martín Llaryora, en Córdoba, del sector del gobernador saliente Juan Schiaretti. Mientras en la provincia mediterránea habrá continuidad en el Poder Ejecutivo Provincial, en el mapa de la bota alternancia. Para los dos gobernadores será clave contar con recursos nacionales que lleguen a tiempo (y no pierdan su valor) para enfrentar el rojo de sus sectores previsionales.
Los artículos ausentes obligan en un caso a que la "Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses)" transfiera "antes del día 20 de cada mes a aquellas provincias que no transfirieron sus regímenes previsionales al Estado nacional, en concepto de anticipo a cuenta del resultado definitivo del déficit correspondiente a cada sistema previsional, un importe equivalente a una doceava parte del monto total del último déficit anual, provisorio o definitivo, conformado para cada una de ellas".
Y aclara el 92 (aún vigente) que "cada anticipo mensual incluirá su actualización conforme con las variaciones en el índice de movilidad jubilatoria del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA). Para calcular dicha actualización se considerará la variación del índice entre el mes de julio del año al cual corresponde el último déficit, provisorio o definitivo, determinado y el mes anterior al del pago de la cuota".
En el siguiente punto del Presupuesto vigente se indica que "una vez determinado el resultado definitivo del déficit previsional anual, se deducirán del monto total a transferir por el Estado nacional los anticipos a valores históricos. La diferencia resultante se actualizará considerando la variación del índice de movilidad jubilatoria del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) entre el mes de julio del año que se está cancelando y el mes anterior al del pago".
En números la Caja recibe más de mil millones de pesos mensuales lo que suma más de 12 anuales, pero su défict resulta sensiblemente mayor. Además, sigue pendiente de liquidación (y actualización) la diferencia asumida por la Nación por atrasos entre 2020 y 2023.