El Consejo de la Magistratura volverá a sesionar en Plenario el próximo 4 de abril, después de cuatro meses de virtual inactividad tras el fallo de la Corte que restituyó la formación de 20 miembros y la designación de los nuevos representantes de cada estamento.
Así lo resolvió una reunión de la Comisión de Labor que sesionó el miércoles pasado, bajo la presidencia del también titular de la Corte Suprema, Horacio Rosatti. La reunión fue cerrada, exclusivamente entre los consejeros y, según fuentes del propio organismo, no se permitió el ingreso ni de asesores, ni de funcionarios del Consejo.
En la reunión estuvieron presentes 18 de los 20 consejeros: el representante del sector académico Hugo Galderisi no asistió por cuestiones personales sobre las que había avisado con anterioridad y el vigésimo consejero aún no fue designado, porque está judicializada la representación del senador por la segunda minoría de la Cámara alta. Voceros del Consejo mencionaron que la reunión se desarrolló en "un clima de concordia", que intentó salvaguardar su funcionamiento de la tormenta desatada por la selección de sus integrantes y en medio del proceso de juicio político, impulsado por el kirchnerismo entre otros por este mismo tema, y en el que semana a semana dispara una nueva andanada de imputaciones contra los jueces del Máximo Tribunal.
Por lo pronto, la Comisión de Labor resolvió que en lo sucesivo los plenarios se realizarán los miércoles, con una periodicidad que fijarán los propios consejeros. En la reunión del 4 de abril, según lo conversado, buscarán definir el nombre del vicepresidente y las autoridades de las cinco comisiones que tiene el Consejo: Selección de Magistrados y Escuela Judicial; Disciplina; Acusación; Administración y Financiera y Reglamentación.
¿Quiénes están?
El Consejo debe tener 20 miembros, pero la Corte objetó la designación del senador kirchnerista Martín Doñate y no le tomó juramento. Esto es así porque el máximo tribunal consideró inválida la decisión de Cristina Kirchner de dividir el bloque de senadores del Frente de Todos para quedarse con tres de los cuatro representantes de la Cámara alta (dos por la mayoría y uno por la segunda minoría), dejando afuera al consejero propuesto por Pro, Luis Juez.
A pesar de las peleas que provocó ese fallo de la Corte y los anteriores, que motivaron el juicio político que el oficialismo activó en Diputados y llevaron al presidente Alberto Fernández a denunciar en la Asamblea Legislativa que los jueces supremos habían "tomado por asalto el Consejo de la Magistratura", el oficialismo decidió integrar la reunión de labor y participar de las negociaciones.
En este Consejo de la Magistratura hay jueces con diferentes cercanías políticas; cuatro diputados y senadores del Frente de Todos y tres de Juntos por el Cambio; abogados que apoyan en parte al Pro y en parte a la UCR; y un bloque que está integrado por los académicos y un sector de los abogados que responde el exconsejero Diego Molea.
Los 18 consejeros que participaron de la reunión de labor fueron los senadores María del Carmen Pilatti Vergara y Mariano Recalde, por el oficialismo, y Eduardo Alejandro Vischi, por la oposición. También los diputados Vanesa Siley y Rodolfo Tailhade, por el Frente de Todos; Álvaro González, por Pro, y Roxana Reyes, por la UCR; el académico Guillermo Tamarit -que respondería al exconsejero Molea-; los abogados Miguel Piedecasas (UCR), Héctor Recalde (Frente de Todos), Jimena de la Torre (Pro) y Fernanda Vázquez (también ligada a Molea); los jueces Diego Barroetaveña y Agustina Díaz Cordero (de la lista Bordó, crítica del Gobierno), Alberto Lugones (de la lista Celeste, más cercana al kirchnerismo) y Alejandra Provítola (de Compromiso Judicial). También el representante del Ejecutivo, Gerónimo Ustarroz, hermano del ministro del Interior, Eduardo de Pedro.
Info: El Litoral.