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jueves, 21 noviembre 2024

Conflicto aeronáutico: Aerolíneas y los gremios encaminaron un acuerdo y continuarán negociando este martes

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Después de más de siete horas de reuniones, consensuaron algunos puntos. El objetivo es que los sindicatos cedan muchos de sus beneficios para que la empresa mejore su productividad. Los pilotos son quienes más se resisten.

Después de más de siete horas de reuniones en la sede de Aerolíneas Argentinas en el Aeroparque metropolitano, las autoridades de la empresa llegaron este lunes a un principio de acuerdo con los tres sindicatos aeronáuticos más combativos que garantizaría la continuidad del servicio, aunque aún debe ser convalidado por las asambleas de cada uno de esos gremios.

Fuentes cercanas a las negociaciones indicaron que las discusiones proseguirán el martes y comentaron que los pilotos aparecen como los más reacios a aceptar los cambios.

El diálogo, una continuidad del que las partes habían comenzado el viernes pasado, se inició a las 14:30, cuando representantes de la línea aérea de bandera recibieron a miembros de la Asociación del Personal Aeronáutico (APA).

Pese a que se había anunciado que posteriormente sería el turno de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) y de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), pasadas algunas horas representantes de los tres sindicatos se unieron en una misma reunión.

Los gremios pujaron por sostener algunos de los beneficios obtenidos en sus convenios colectivos, pero se encontraron con una posición irreductible de parte del Gobierno nacional, que había instruido a las autoridades de Aerolíneas a no ceder en algunos puntos claves, bajo la advertencia de avanzar con los trámites para el Procedimiento Preventivo de Crisis, el paso previo al cierre de la compañía.

Finalmente, tras arduas conversaciones, entre las que hubo varios "cuartos intermedios" durante los cuales los representantes sindicales se reunieron con los titulares de los gremios para analizar las propuestas y contrapropuestas, comenzó a salir a la luz un proyecto de solución.

La base del diálogo fueron las modificaciones en los convenios colectivos de trabajo, quedando en un segundo plano la negociación salarial, en la cual el Ejecutivo ofreció un tope máximo del 14%, mientras que los trabajadores solicitaban que se pusiese sobre la mesa un 35% de incremento.

El preacuerdo garantizaría, por un lado, la continuidad de las operaciones de la empresa de manera normal y, por el otro, dejar de lado, por el momento, la intención de iniciar el Procedimiento Preventivo de Crisis.

Ahora, los sindicatos deberán presentar a las respectivas asambleas lo acordado para que éstas lo validen. Según fuentes cercanas a las negociaciones, estos son los puntos de acuerdo alcanzado con cada gremio:

Con APLA se acordó:

  • Renunciar a pasajes en "clase ejecutiva" confirmada, incluyendo a jubilados, con lo cual se recupera un potencial de ventas de USD 8.000.000 al año
  • Renunciar a asientos de descanso en "ejecutiva". En todos los aviones los pilotos gozaban de este beneficio. En vuelos a Europa tenían dos y a Estados Unidos, uno. Eso significaba un promedio de 10 asientos por día, por lo que se recupera un potencial de ventas de USD 5.000.000 al año
  • Renunciar al día libre obligatorio en cumpleaños
  • Renunciar a que el tiempo de servicio comienza desde el momento en que suben al remis
  • En cuanto a los remises, se cancelan para capacitaciones y se acordó que por el momento se seguirán utilizando hasta tanto se concrete la baja de los contratos

El acuerdo con la AAA:

  • Renunciar al inicio del tiempo de servicio desde que suben al remis
  • Paso a pool de tripulantes: todos pasarán a hacer vuelos de todos los aviones y zonas
  • Renunciar a horarios de descanso por empresa y pasar a horas regulatorias
  • Renunciar a zona de descanso tipo cama para vuelos de largo alcance
  • Aceptar realizar ventas de productos a bordo, que hasta ahora estaban bloqueadas por los sindicatos
  • Al igual que los pilotos, cancelación de los remises para capacitaciones

Con la APA se acordó:

  • Aceptar el "self bag drop", que es la entrega de equipaje por el propio pasajero, como ocurre actualmente en la mayoría de los aeropuertos del mundo
  • Aceptar el "auto check in" en terminales, algo a lo que sistemáticamente se negaban los gremios
  • Aceptar la prestación de servicios a terceros, un negocio que puede brindarle a Aerolíneas un ingreso de USD 10.000.000 al año
  • Aceptar la polifuncionalidad en hangares y en servicio, lo que permite mover personal y cambiar choferes.

Fuente: El Canciller

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