Un gran torrente de residuos cloacales emanó el martes durante la tormenta que cayó sobre la ciudad desde una cañería averiada hacia el riacho Santa Fe, a la altura de su desembocadura en el río homónimo, junto al Puente Héroes de Malvinas. Esto despertó la preocupación de los vecinos de la zona, no sólo por los olores nauseabundos sino también por la contaminación.
La preocupación también es del resto de los vecinos de la ciudad ya que dichos residuos cloacales terminaron en el río Santa Fe y navegaron aguas abajo hasta la zona de la toma de agua que abastece a la planta potabilizadora de agua que abastece a la ciudad.
“No puede ser que esto pase como algo natural”, dijo María Teresa Schutt, una vecina de La Vuelta del Paraguayo, que vive a metros del lugar. “Nosotros convivimos constantemente con el agua, porque es sustento”, agregó. “En mi caso, vivo de la pesca y también varias familias sacan carnada para vender. Eso implica que tengan que meterse al agua por varias horas y justamente ahora que está creciendo el río el agua está entrando desde el riacho a los arroyos y lagunas de nuestro barrio”, advirtió.
“No entiendo como se puede contaminar no sólo el riacho sino también la laguna Setúbal, la cual justamente habilitaron días atrás para la continuidad de la temporada de playas”, agregó luego la vecina, y reclamó “que alguien de las autoridades del Gobierno salga a dar la cara y de una solución definitiva a esta situación que perjudica a muchos”. En el lugar a donde está la cañería averiada se puede observar a simple vista el agujero por donde emanó este martes el líquido cloacal. También se puede observar el canal a través del cual los desechos terminaron sobre el riacho Santa Fe, junto al puente Héroes de Malvinas, a través del cual se accede al distrito costero de Alto Verde.
La explicación
“En el conducto de descarga del sistema cloacal, luego de la cámara de carga conocida como ‘el cucurucho’, se produjo una rotura que se estaba interviniendo para su reparación”, explicó el vocero de Aguas Santafesinas, Germán Nessier. “La empresa contratista a cargo de las obras tuvo la semana pasada un percance. Está previsto retomar las tareas para resolver ese inconveniente”, informó luego. Y sobre el problema puntual ocurrido el martes, Nessier explicó que fue “producto del exceso de aporte de líquidos que no deberían estar en el sistema cloacal, el cual se carga de agua de lluvia y hace que trabaje a alta presión y se desborde”.
Dicho desborde “está canalizado y controlado”, dijo el vocero de ASSA, en referencia al canal artificial a través del cual navegaron los restos cloacales hacia el riacho. “Se hizo para poder encausar los líquidos en escenarios como el que se produjo ayer (martes) por la tarde, y poder proceder luego a la reparación de este conducto”, finalizó.
Fuente: Radio Gol y UNO