Tras conocerse la decisión del gobierno nacional de eliminar el Fondo Compensador del transporte para todo el interior del país -en medio del segundo día de paro de choferes, que ahora se “estiró” hasta este viernes-, las ecuaciones de la matriz de costos del sistema de transporte público de pasajeros por colectivos en la ciudad de Santa Fe quedaron completamente desvirtuadas.
Al menos así lo advirtieron desde la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap), que nuclea a los empresarios del sector. La pregunta clave es -al menos en un escenario hipotético-, cómo se podría sostener un servicio clave para miles de santafesinos sin la llegada de los subsidios nacionales.
“Tenemos la confirmación de que el Fondo Compensador (unos 11.500 millones de pesos para todo el interior) no va a llegar. Un buen porcentaje estaba previsto para el pago de sueldos de los choferes. Al no recibirlo, no pudimos abonar la totalidad de los sueldos (sólo se pagó un 40%) y hoy el servicio está parado”, puso en contexto en diálogo a El Litoral Gerardo Ingaramo, presidente de la Fatap.
Sin el Fondo, no se podría sostener el servicio, y sin otro aumento de tarifas menos, afirmó. A ello se suma el aumento salarial que está solicitando la Unión Tranviarios Automotor (UTA): “El incremento solicitado por el sindicato para todo el interior del país de enero, febrero y marzo, representa unos 57.000 millones de pesos. Para la provincia de Santa Fe, son 7 mil millones de pesos en tres meses. Esa plata no está”, aseguró el referente.
En términos estimativos, para que Santa Fe siga contando con el servicio de colectivos urbanos, “la Provincia tendría que hacer el aporte que ahora quita Nación (de acuerdo al Pacto Fiscal de firmado en 2018), es decir, disponer entre 1.500 y 1.600 millones de pesos más por mes para todo el sistema de transporte”, estimó Ingaramo. Hoy, el gobierno provincial aporta unos 2.000 millones de pesos en toda la bota santafesina.
¿Y en la ciudad?
Además, sólo para cubrir salarios, “en la capital las tarifas tendrían que aumentar al menos unos 300 pesos más de lo que cuesta hoy (en Santa Fe ciudad la tarifa plana está en 380 pesos). Estamos hablando de una tarifa de entre 680 y 700 pesos”, calculó.
Y más allá de la buena predisposición desde el gobierno local -que en enero emitió dos resoluciones liberando fondos no reintegrables del Tesoro municipal por 100 millones de pesos para el sostenimiento del sistema-, “pedimos que el municipio se haga cargo también”, requirió el empresario.
Aquí, dio ejemplos de lo que pasa en otras ciudades. “En Córdoba o Rosario, el servicio está funcionando porque también los municipios están aportando mensualmente fondos para las empresas prestatarias”.
Consultado por este diario sobre cuánto estima que debería aportar el municipio de esta capital para que haya colectivos circulando, el presidente de la Fatap estimó en “entre 400 y 500 millones de pesos mensuales, al menos por tres meses”.
El gobierno nacional, cabe aclarar, ratificó la vigencia de los atributos sociales, que representan un 45% a cargo de cada usuario, y Nación aportaría la diferencia. Entonces, con un boleto a 700 pesos (siempre en términos especulativos), un pasajero con ese beneficio abonaría unos 320 pesos de tarifa plana.
Salida alternativa
–Siguiendo este escenario hipotético sin el Fondo Compensador para el interior, y suponiendo que se aportaran desde los gobiernos provincial y municipal esos montos que Ud. estimó, ¿el servicio seguiría con todas las unidades o mermado?, consultó El Litoral a Ingaramo.
-De acuerdo a lo que planteo, diría que podríamos tener un servicio adecuado para la ciudad, con prestaciones normales. Si no vienen esos aportes, claramente se resentiría el servicio en cuanto a las unidades que estén en calle, que serán menos.
Autobuses SRL tiene unas 78 unidades, y Ersa Urbano unas 50. Con 180 coches en calle se garantiza un servicio prestado en términos adecuados (en época escolar, particularmente). Pero si no tenemos los ingresos necesarios, vamos a funcionar con muchos menos coches, si es que el sistema funciona.
Emergencia
“¿Queremos continuar con servicios precarios, que la gente viaje mal, incómoda? Nadie quiere eso. Pero esta es la situación en la que estamos hoy. La Municipalidad quiere dictar la emergencia (en transporte), se tendrán que sentar con los ediles del Concejo de Santa Fe y buscar una salida alternativa para el sector. Desde la Fatap, no la tenemos”, aseveró Ingaramo.
Los colectivos en la ciudad de Paraná se paraban (este jueves) pero no tienen más gasoil. En Jujuy están parados, en Chaco también, por la misma razón: “Es muy grande la brecha entre lo que aumentó todo (particularmente el combustible) y lo que nosotros percibimos por tarifas”, adujo.
El peor escenario
Consultado sobre si sirve la emergencia en transporte que busca se declare Juan Pablo Poletti, Ingaramo consideró que sí, “en tanto el intendente tendría herramientas para poder buscar alguna solución alternativa, y disponer de algún financiamiento”.
Los empresarios del transporte presentaron un Procedimiento Preventivo de Crisis. “¿Por qué? Porque si no llegamos a buen puerto el 1° de marzo con este escenario de crisis extrema y no tenemos los ingresos necesarios, de 180 coches dejaremos 100 funcionando, y van a quedar empleados en la calle. Llegar a esta situación terminal es algo que nadie quiere”, concluyó el presidente de la Fatap.
Con información de El Litoral