La situación abarca gran parte del territorio santafesino y temen por la situación del trigo, el cual incrementó su condición regular a mala en un 32%.
Hay gran preocupación en el sector del campo por la gran falta de lluvias en toda la zona núcleo que abarca gran parte de la provincia de Santa Fe. Los últimos informes hablan de áreas con reservas de agua en estado de sequía en un 64%.
Sin pronóstico de lluvias
Los pronósticos de precipitaciones generalizadas sobre la franja central del país no se concretaron. Con máximas de 30 a 35°C y fuertes vientos, el área con reservas de agua en el suelo en estado de sequía pasaron de 54% a 64% en una semana. Los expertos consideran que hacen falta entre 80 a 140 milímetros para comenzar a revertir esta situación.
Hay gran preocupación en el sector del campo por la gran falta de lluvias en toda la zona núcleo que abarca gran parte de la provincia de Santa Fe. Los últimos informes hablan de áreas con reservas de agua en estado de sequía en un 64%.
El trigo comienza su período crítico con casi la tercera parte del trigo de la región en condiciones regulares a malas y definitivamente se espera una caída de los rindes. En el oeste ya esperan una merma del potencial en torno al 10%, en otras áreas del este se siguen aferrando a un rápido auxilio de las lluvias en los primeros días de octubre.
"Lamentablemente, en este contexto, la región núcleo se despide de alcanzar un horizonte productivo de 5 millones de toneladas en trigo", afirmaron desde el sector.
¿Cómo está el trigo en distintos distritos?
En Marcos Juárez, hace 7 días atrás se calculaba alcanzar un rinde promedio de 40 qq/ha, hoy ya no: “hay macollos que no van a hacer espigas”, explican los técnicos. Allí, hay 20% de trigo malo y 40% regular.
En Carlos Pellegrini y El Trébol estimaban entre 30 a 35 qq/ha, pero hoy explican que “se necesita humedad para avanzar con la formación de los granos. Sin agua, de ahora en más, el cultivo empezará perder potencial”.
En Piedritas, “los trigos estaban para 50 qq/ha, pero no se va a dar”, dicen los técnicos. En Bigand, los aumentos de temperatura y el viento marcaron al cultivo con áreas desuniformes y deterioradas. “Solo una lluvia en los próximos días podrá detener la caída del rinde”, dicen.
En Bombal y en Colón, si bien aún no se perciben síntomas de falta de agua, “es necesaria una lluvia pronto para mantener el potencial de rinde de 45 qq/ha
Fuente: Diario Uno