El administrador provincial de Vialidad, Pablo Seghezzo, contó a El Litoral cuál fue el estado en el que encontraron la autopista Santa Fe – Rosario al asumir nuevamente la gestión. Confirmó que volverán a la figura de un fideicomiso público para administrarla, y adelantó los cambios de fondo que plantean para el sistema de peaje. "El actual ya estará perimido", sentenció.
– ¿Cómo encontraron a la autopista Santa Fe – Rosario?
– La verdad que la encontramos sin ninguna inversión durante cuatro años; no se hizo ninguna inversión de mantenimiento. Ésa es la realidad. Nosotros habíamos hecho tres contratos de repavimentación en la gestión anterior; incluso, dejamos los pliegos listos para repavimentarla completamente pero no sólo que no se continuaron, sino que tampoco se hizo un mantenimiento mínimo de sellado de fisuras. Eso es lo mínimo que se hace en cualquier ruta y más en una autopista con el tránsito que tiene ésta, y que además tiene mucha circulación de camiones. Ésta fue la primera autopista que tuvo la República Argentina; tiene una estructura antigua y hay que mantenerla, hay que invertirle.
– Con el uso intensivo de la autopista y si no se hicieron trabajos de mantenimiento mínimo, ¿La situación es grave?
– Es cada vez peor; depende del kilometraje. Algunos están bien y otros como el 120, son hasta peligrosos en términos viales por los baches. Ya empezamos con planes de bacheo en lugares en los que en realidad, hay que pavimentar. Uno se cuestiona si vale la pena bachear cuando sabemos que luego hay que repavimentar, pero tampoco se puede dejar así por una cuestión de seguridad vial…
– En más de una ocasión, el personal denunció durante los años anteriores un estado casi de abandono. ¿Llegan a la misma conclusión?
– Sí, hay diferentes situaciones. Creo que lo del personal ha tenido que ver más que nada con lo administrativo, no con la obra de ingeniería. (Durante la gestión anterior) se hizo una Unidad Ejecutora que depende de Vialidad, entonces, en todos los temas de contratación, pagos y demás, regían los tiempos del estado que son muy lentos. A diferencia de lo que sucedía cuando teníamos el fideicomiso (durante la gestión anterior) que nos permitía contratar de manera más ágil y directa. Eso, al pasar al área de Vialidad Provincial, obliga a cumplir con un esquema burocrático que es correcto, pero que dificulta el mantenimiento de una autopista. Son cuestiones administrativas; otra cosa es el mantenimiento de la red vial y de la infraestructura, que es vital.
– ¿Qué figura jurídica o legal elegirán para administrar la autopista?
– La intención es volver, al menos transitoriamente, a la figura del fideicomiso público porque con sus protocolos y procedimientos, tiene la capacidad de contratar, de hacer pedidos de cotización pero todo más rápido, mucho más rápido y ágil.
– ¿Cómo estaría constituido ese fideicomiso?
– Una posibilidad es volver a trabajar con el Banco Municipal de Rosario, pero lo estamos viendo. También estamos conversando con otras entidades. Es un contrato de fideicomiso que lo hace Vialidad provincial, y redundaría en una mayor agilidad en la contratación de bienes y servicios. Por ejemplo, tenemos la intención de aumentar todo lo que es telepase e ir hacia la automatización de los sistemas. Todo eso hay que contratarlo e instalarlo, y si uno lo quiere hacer desde el estado, es mucho más lento.
– Hay momentos en el que el telepase hoy no funciona….
– Habíamos detectado muchas fugas; gente que pasaba sin pagar o que pasaba y no estaba adherida al telepase. Entonces se está cerrando en un determinado momento del día, en determinadas horas pico, y estamos empezando a implementar el sistema de multas para el que pasaba o intenta pasar sin pagar.
– ¿Qué cambios imaginan para el corredor?
– Ésta es una autopista que ya es inteligente; el tema es para qué se usó esa inteligencia. Ya hay cámaras, sensores… Ahora hay que empezar a operar todo esto. Las pantallas que generan las imágenes están; el tema es tener los mecanismos para que todo eso genere respuestas en materia de seguridad, de auxilio y control para la gente que circula. Para eso tenés que tener, por lo menos contratado, el sistema que se necesita.
– ¿Evalúan cambiar el régimen tarifario?
– Lo más lógico es que se vaya actualizando (en función de la inflación); sí hicimos mucha diferencia con lo que es el Telepase, que prevé un 30% de descuento. La idea es profundizarlo porque realmente queremos que se vaya al telepase y que todo sea automático. Hay lugares donde se aplica el sistema de free flow; es decir, cámaras en un pórtico que registran la patente y debitan directamente de tu cuenta bancaria asociada, el valor del peaje.
– A propósito, ¿Tiene sentido un sistema de peaje, si la obras de infraestructura y mantenimiento las paga la provincia?
– Con el sistema de peaje como tal, no; con el sistema free flow, sí es lógico. Con el sistema tradicional, no, porque tampoco se te puede ir el 60% de la recaudación en pago de personal. Es una cosa que no es lógica.
– ¿Ése es el porcentaje que va a sueldo de personal?
– Claro, son sueldos altos, que está muy bien y me parece bárbaro pero hay que ver también la cantidad de gente.
– ¿Son muchos los empleados?
– Y, si se cobra sólo a través del sistema tradicional de peaje, obviamente que se necesita mucho personal.
– ¿Y cómo modificarían el sistema para modificar esa ecuación?
– Con el sistema free flow; es lo queremos hacer. Son directamente cámaras ubicadas en pórticos sin cabinas de peaje y el cobro se produce de manera automático. El personal se dedica a un centro de monitoreo y a la cuestión informática. Eso ya se está instrumentando en autopistas de Buenos Aires. No digo que está en Europa o EE.UU; está ya en nuestro país. Acá en Santa Fe, no aún, pero es lógico que lo implementemos porque no es el futuro; es el presente. Hacia allí tenemos que ir.
– ¿Qué destino tendría el personal del sistema actual?
– Se lo reeduca para que opere el centro de monitoreo o para que realice otro tipo de tareas; algunos se irán reubicando o jubilando. Hoy tenemos 260 empleados. Y no llegamos a cubrir todos los turnos en época de vacaciones, por ejemplo. Por eso tenemos que cambiar al sistema, pensando en la gente, pero tampoco podemos seguir atados a un sistema que ya perimió.
– ¿Tienen plazos?
– Primero tenemos que hacer el fideicomiso.
– Se había proyecto en su momento un tercer carril ¿Mantienen esa iniciativa?
– Sí, en el tramo Rosario – San Lorenzo centro. Por la autopista en esta época de cosecha, van a pasar aproximadamente 17.000 camiones por día. Ésa es la idea pero hay que buscar cómo financiarla y tener el proyecto adecuado.
– Precisamente, ¿cómo encaran la gestión con la restricción actual de recursos y sin inversiones de Nación?
– Se ve día a día. Ahora estoy conforme porque tengo siete grupos de bacheo que para mí son fundamentales porque dan transitabilidad. Y esos ya los tenemos trabajando. No son muchos, pero ya están trabajando. Pero es día a día. Y en cuanto a la autopista, es una prioridad; y nuestra idea es repavimentarla a lo largo de la gestión en toda su traza. Casi el país completo pasa por este corredor; ésas son grandes ventajas que tiene Santa Fe.
Con información de El Litoral