El neurocirujano Leopoldo Luciano Luque negó este lunes haber estado a cargo de la internación domiciliaria donde falleció Diego Armando Maradona, deslindó responsabilidades en la empresa de medicina prepaga, pidió la realización de una nueva junta médica y aseguró que nunca se representó la posibilidad de la muerte del “10” porque las patologías que presentaba surgieron en la autopsia y no en los chequeos médicos que se hizo en vida.
“Lamento profundamente el deceso de Diego Armando Maradona. Era mi paciente y mi amigo”, afirmó Luque en unas de las primeras frases del descargo por escrito de 85 páginas, que presentó en la Fiscalía General de San Isidro, donde era indagado desde este mediodía por los fiscales de la causa.