La canasta básica alimentaria (CBA) para que una familia de cuatro integrantes -compuesta por dos adultos y dos chicos- no caiga bajo el umbral de la indigencia, alcanzó los $62.106 en octubre, más del doble de los $30.925 que había necesitado en el mismo mes de 2021. El salario mínimo no alcanzó a cubrirla y los planes sociales ni siquiera llegaron a la mitad.
De acuerdo con los datos que dio a conocer este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), para que ese mismo hogar no sea considerado pobre se necesitaron $139.739 en octubre. Así, la Canasta Básica Total (CBT) resultó un 93,1% más alta que hace un año. Las cifran dejan al descubierto que la aceleración de la inflación sigue golpeando con mayor fuerza a los sectores más vulnerables, que son los que destinan la totalidad de sus ingresos para cubrir necesidades alimentarias.
Trabajadores pobres
Otro de las realidades que reflejan los datos del INDEC tiene que ver con la cada vez mayor cantidad de personas que aún con un trabajo estable no llegan a cubrir las necesidades básicas de sus familias. En octubre, el salario mínimo, vital y móvil fue de $54.550. Además de ser el piso a partir del cual se debe abonar el trabajo de los empleados bajo relación de dependencia, funciona también como referencia para el sector no registrado, de ahí su impacto.
Si en una familia de cuatro personas solamente trabaja uno de los adultos que cobra el salario mínimo, ese ingreso no alcanzó para evitar que los cuatro caigan bajo la línea de la indigencia, debido a que tendría que haber superado los $62.106. Y para no ser considerado pobre, el ingreso debería haber sido de $139.738 para cubrir la CBT -que comprende alimentos y otros bienes y servicios básicos, como la vivienda-. Es decir, que ni aun trabajando los dos adultos se hubiera alcanzado ese monto, ya que se requirieron dos salarios mínimos y medio.
El martes 22, el Ministerio de Trabajo convocó a gremios y empresarios al Consejo del Salario para que acuerden una nueva actualización del salario mínimo, en un contexto de alta aceleración inflacionaria. El Polo Obrero tiene previsto movilizarse para acompañar el reclamo de los trabajadores, bajo la consigna “salarios por encima de la inflación”
Sectores vulnerables, los más golpeados
Para los sectores desocupados la situación tampoco resultó mejor la situación. En la Argentina, cerca de 1,3 millones de personas están inscriptas al Potenciar Trabajo, por el que reciben $25.000 mensuales. Ese ingreso no alcanzó a cubrir media canasta de alimentos. Sin embargo, muchos perciben otras prestaciones como la Asignación Universal por Hijo (AUH) que ayuda a mitigar el impacto sobre la vulnerabilidad de esas familias.
En el caso de quienes no tienen ningún beneficio, ni ningún tipo de ingreso, el Gobierno comenzó a pagar un bono de $15.000 mensuales, por tres meses. La cifra es apenas un 50% mayor al IFE (Ingreso Familiar de Emergencia) que se pagó durante la pandemia de coronavirus, hace dos años. Mientras que la CBA aumentó más del 100% en solo 12 meses.
En el caso de los Monotributistas, la categoría A -la más baja del régimen simplificado- implica la facturación de hasta $62.365 mensuales, es decir, que apenas cubrió la CBA, y dos monotributistas A no cubrieron la CBT, suponiendo que esa familia solo tengan ese ingreso.
Fuente: TN