El pasado 1 de octubre, luego de siete postergaciones por parte del Gobierno nacional, aumentaron los impuestos al combustible en Argentina, incrementando en consecuencia el valor de la nafta y el gasoil.
A pesar de que dicha suba de alrededor de $5 por litro en las naftas y de $4 en el diésel se dio tras varios meses de espera, desde el equipo económico de Sergio Massa alertaron que no sería el último antes de fin de año.
La propia secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, expresó que “puede haber movimientos de acá a fin de año”, argumentando que “estamos en un contexto inflacionario”.
Teniendo en cuenta que en lo que va del 2022 aumentó un 52% la nafta, la inflación acumulada es de 56% y el costo de vida subió 62%, Royón indica que “los combustibles vienen retrasados con respecto a la inflación”.
Las petroleras aplicaron un aumento del 6% a comienzos de mes. Lo justificaron en una actualización en los impuestos que pagan y un mayor precio en el biodiesel que deben comprar. También hubo una mejora de sus márgenes.
Sin fijar de manera pública los números de lo que sucederá en los próximos meses, el comentario entre refinadores es que habrá dos incrementos, y que ninguno estará por debajo del 6%.
La secretaria de Energía aseguró al respecto en un programa radial de la ciudad de Buenos Aires: “Los precios de los combustibles están desregulados. Igual, se conversa con las operadoras para que no tengan una escalada de precios, ni valores internacionales”.
“Todavía es necesario importar algo de combustible”, marcó Royón para explicar que las petroleras suelen buscar un precio que refleje la “paridad de importación”. Es el importe que se paga cuando se compra petróleo extranjero. Y el que suelen observar las compañías para medir sus resultados.
También circula, en el sector, una idea por avanzar en subas superiores (cercanas al 9%) para luego implementar un congelamiento durante 2023. Es una herramienta que el Gobierno ya utilizó en las elecciones legislativas de 2021. Entre mayo de 2021 y febrero de 2022, no hubo aumentos de precios.
Cómo quedaron los precios tras el aumento del 1 de octubre
YPF
- Súper: $ 154,20
- Infinia: $ 187,00
- Diésel 500: $ 165,30
- Infinia Diésel: $ 218,30
Shell
- Súper: $ 160,20
- V-Power: $ 192,40
- Diésel: $ 178,50
- V-Power Diésel: $ 224,60
Axion
- Súper: $ 156,70
- Quantium: $ 190.60
- Diésel: 172,20
- Quantium diésel: $ 210,80
Respecto a Buenos Aires, en el interior del país se registran precios en promedio un 20% más caros. La Patagonia es la única región que se encuentra por debajo del AMBA.
La estimación entre dueños de estaciones de servicio es que la premium terminará el año por arriba de los $200.
Fuente: El Litoral