Los gastos primarios del gobierno nacional sumaron $15.307.666 millones al 31 de julio y mostraron una contracción de 8,3% a/a (en comparación con los 7 primeros meses de 2022) en términos reales, según consignó la Oficina Nacional de Presupuesto en base a datos oficiales.
Los gastos totales, por su parte, sumaron $17.054.695 millones y disminuyeron en una magnitud menor (6,0% a/a), como consecuencia del incremento real de los intereses de la deuda (21,2% a/a).
"Las disminuciones reales más relevantes se registraron en las transferencias a provincias (28,0% a/a), en las asignaciones familiares (25,3% a/a), en los subsidios a la energía (22,9% a/a) y en los programas sociales (21,3% a/a)".
En el caso del rubro jubilaciones y pensiones, si bien la disminución real fue más acotada (3,8% a/a), resultó el cuarto rubro de mayor contribución a la reducción del gasto dada su participación en la estructura del gasto primario (39,7%).
En sentido contrario, los intereses de la deuda (21,2% a/a), las transferencias a universidades (12,4% a/a), los subsidios al transporte (12,2% a/a) y los gastos en personal (8,2% a/a) presentaron subas con relación a la ejecución de un año atrás.
Rojo fiscal "billonario"
"Como resultado de esta dinámica -señala el informe de la OPC- se registró un déficit financiero de $4.130.043 millones, 8,7% menor en términos reales con relación al obtenido en los primeros siete meses de 2022″.
El déficit primario (no computa el pago de los intereses de la deuda) que alcanzó $2.383.014 millones, 22,6% inferior que el registrado en el mismo período del año anterior.
El dato es significativo por cuanto en las negociaciones en el FMI se señala que en proporción está en el orden del 2,5% del PBI y aún debe "ajustar" hasta el 1,9% ratificado en el acuerdo técnico que Sergio Massa procurará ratificar ante el directorio del organismo en Washington.
"En tanto, el resultado económico fue deficitario en $3.075.327 millones. Al 31 de julio los gastos totales devengados representaron el 57,9% del crédito presupuestario vigente. Pero los programas sociales superaron ese nivel en la ejecución: Alimentar 84,3%, Potenciar Trabajo 81,6% y becas Progresar 76,6%. Lo que abre un signo de interrogación sobre su financiamiento hasta fin de año.
"También se destacan las transferencias a universidades (80,9%), los gastos en personal (69,3%), los subsidios económicos (62,3%), y los intereses de la deuda (60,1%)".
Por el otro lado, con niveles de ejecución más moderados, se ubican los bienes y servicios (40,8%), los gastos de capital (44,5%) y las transferencias a provincias (47,7%).
Los ingresos en retroceso
Los ingresos de la Administración Nacional acumularon al 31 de julio $12.924.652 millones, lo que significó una contracción en términos reales de 5,1% respecto a igual período del año anterior, según los cálculos de la OPC..
Dicha contracción se reduce a 4,0% a/a (en los primeros siete meses de este año respecto de igual período de 2022) si se computan dentro de los ingresos corrientes (rentas de la propiedad) $150.000 millones que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) le transfirió al Tesoro Nacional en el mes de julio en concepto de distribución de utilidades.
"Los ingresos impositivos disminuyeron 10,9% en la comparación interanual, con una dinámica dispar de los principales tributos. Por un lado, la recaudación del IVA se expandió 8,4% año contra año (a/a) y los ingresos por el Impuesto al Cheque crecieron 0,9% a/a, ambos en términos reales.
"En sentido contrario, los Derechos de Exportación e Importación y el Impuesto a las Ganancias reflejaron caídas reales de 56,2% a/a, 14,0% a/a y 9,9% a/a, respectivamente", describe el informe en referencia al alto impacto no sólo de las sequía.
El retroceso de la recaudación tributaria se compensó parcialmente con el incremento de los recursos provenientes de la Seguridad Social, que mostraron una expansión real de 2,7% a/a.
¿Nuevo presupuesto?
Cabe recordar que la ley nacional de Presupuesto de 2023, a instancias del radical puntano Alejandro Cacace, incluyó una cláusula según la cual, cuando se llegara al 60% de inflación, había que rediscutir la norma. El Nivel general del Índice de precios al consumidor registró un alza mensual de 6,3% en julio de 2023, y acumuló una variación de 60,2% según el Indec.
Cacace había advertido que la oposición solicitaría la ampliación presupuestaria luego de las primarias. El desafío es saber qué actividad tendrá el Congreso -en medio de la crisis posdevaluatoria y política- de aquí a los comicios presidenciales del 22 de octubre.
Fuente: El Litoral