El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la Fundación Rosa Luxemburgo y el Programa de Estudios Regionales y Territoriales (IGEO-UBA) realizaron un estudio sobre la desregulación del sistema alimentario. Entre los hallazgos, los investigadores destacaron que de noviembre a julio se desmantelaron 111 políticas públicas relacionadas con la producción, consumo y acceso a los alimentos.
Así, para el análisis, se relevaron estas políticas y se volcaron los resultados de producción, acceso, y apoyo al consumo popular a través de un "semáforo". Además, para hacer más representativo el estudio, se calculó el aumento del precio de un plato de guiso y de una taza de mate cocido con pan (se analizó el valor de ingredientes y su relación con el SMVyM, entre noviembre de 2023 y julio de 2024).
El costo de preparar un guiso aumentó un 151% en 8 meses. En la comparación con el SMVyM o una jubilación mínima en julio, se determinó que se logran preparar un 27% menos de porciones que en noviembre. En el mismo sentido, la porción de mate cocido con pan implica un incremento del 147%; solo la leche en polvo aumentó un 166% en el mismo período.
El estudio también reflajó como bajó el consumo de los alimentos. Así, sostienen que se redujo, en promedio, un 16% en supermercados y un 11% en autoservicios mayoristas entre noviembre de 2023 y julio de 2024. Las caídas más significativas fuerone en: en bebidas (-26%), lácteos (-12%), carnes (-9%), frutas y verduras (-7%), y productos de almacén (-6%).
Como contracara, las empresas alimentarias incrementaron sus ganancias en un 1300% y el complejo exportador de granos un 4900%, entre noviembre y julio. En ese mismo periodo, los precios de los alimentos aumentaron un 128%.
Fuente: Ámbito