El ministro de Economía, Luis Caputo, con parte de su equipo, asistirán desde este lunes en Estados Unidos a la cumbre anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) donde, entre otras cosas, quiere reunirse con la titular del organismo Kristalina Georgieva para convencerla que autorice nuevos desembolsos respaldándose en los resultados de la fase dos del plan económico, que consiste en emisión cero.
El ministro de Economía argentino participa de la Cumbre Anual del FMI
La reunión anual se extenderá hasta el sábado 26 de octubre y convoca a los banqueros centrales de todo el mundo. Foto: Agencia
La reunión que se realiza anualmente se extenderá hasta el sábado 26 de octubre y convocará a los responsables de la gestión económica y a los banqueros centrales de todo el mundo. En representación de la Argentina, Caputo acudirá junto al presidente del Banco Central (BCRA), Santiago Bausili, el viceministro de Economía, José Luis Daza, y el secretario de Finanzas, Pablo Quirno.
La apuesta de Caputo y de quienes los acompañan es tratar de convencer a los representantes del BID, BM, G20 y G24, organismos que participan de la Cumbre, de que Argentina ha tomado las medidas fiscales y monetaria necesarias para transitar un camino de desinflación que esperan este mes esté por debajo del 3% después de alcanzar el 3,5% en septiembre, la reducción de la brecha cambiaria al 20% en las últimas semanas, y la caída del riesgo país a 1.050 puntos básicos.
Revisión pendiente
De acuerdo con la agencia de noticias NA, se prevé que Caputo se reúna con la titular del FMI, Kristalina Georgieva y su número dos, Gita Gopinath, mientras está pendiente la aprobación de la novena revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas, que analiza el segundo trimestre de 2024 y en la que el Gobierno cumplió con las metas previstas de reservas, cuentas públicas y emisión.
Pero, dice la agencia, de cara a la décima revisión que corresponde al tercer trimestre, con plazo de vencimiento el 10 de noviembre, se registra un incumplimiento en la meta de reservas, al contar con US$ 2.000 millones menos, lo que debería revertirse antes de esa fecha. De todas maneras, no afectaría la evaluación definitiva, que en caso de ser positiva en ambas instancias aportaría un desembolso de US$ 1.069 millones.
Por Gabriel Rossini
