El BCRA terminó la última rueda operativa de la semana con una compra por USD 1 millón en el mercado de cambios, para redondear un saldo favorable de USD 242 millones por su intervención semanal en el segmento de contado del mercado de cambios, según datos provisorios. La entidad monetaria hilvanó 14 sesiones consecutivas con compras netas.
“Agosto fue el mes de mayor acumulación de reservas del Banco Central desde agosto del 2006”, dijo el ministro Sergio Massa esta tarde en la celebración del Día de la Industria, en Entre Ríos.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones recordaron que el Banco Central acumuló “un saldo positivo de USD 1.256 millones en el MULC en agosto, de los cuales USD 1.126 millones fueron adquiridos tras la devaluación del 14 de agosto. Un detalle no menor es que USD 1.028 millones fueron utilizados para intervenir en MEP, por lo que las compras del BCRA neto de esta intervención fueran apenas USD 228 millones. Destacamos que el ritmo de compras diarias en el MULC disminuyó fuertemente de USD 162 millones los primeros cuatro días tras el salto discreto a USD 53 millones desde entonces”.
“Esto venía ocurriendo dado que la ‘otra’ oferta, principal proveedor de divisas desde el 14/08, comenzó a perder impulso. Recordamos que, en nuestra opinión, los bancos habrían irrigado de dólares al MULC para hacer carry, aprovechando la fuerte suba de tasas de interés en pesos y la fijación del dólar oficial en $350. A esta contracción de la ‘otra’ oferta se le suma una relativa mayor demanda autorizada de yuanes”, agregaron desde Portfolio Personal.
El ingreso de agrodivisas en agosto pasado fue de USD 1.746 millones y en lo que va del presente año acumula un total de USD 14.702 millones, un 42,8% menos que lo ingresado en los primeros ocho meses de 2022.
Tales cifras -informadas por CIARA (Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina) y CEC (Centro Exportador de Cereales)- si bien son sustancialmente menores a las registradas el año pasado, son muy aceptables si se tiene en cuenta que la Argentina registró en el ciclo 2022/23 uno de los peores desastres climáticos de su historia productiva a partir de heladas y sequías que se llevaron la mayor parte de las cosechas de granos finos y gruesos.
“El impacto de la sequía está siendo muy significativo en dos frentes sensibles: el flujo de dólares por un lado y la recaudación de derechos de exportación, por otro. El flujo de dólares obliga al uso de otras fuentes, para evitar una mayor caída del nivel de actividad. La menor recaudación de derechos de exportación también obliga a buscar otra fuentes de recursos, ya que el FMI mantuvo sin cambios la meta fiscal del 1,9% del PIB definida previamente, a pesar de la gran sequía”, explicó Nadin Argañaraz, director del IARAF (Instituto Argentino de Análisis Fiscal).
Las reservas internacionales brutas del Banco Central se redujeron en USD 126 millones el jueves, para finalizar en los 27.814 millones de dólares. Estos activos subieron un USD 3.782 millones en el transcurso de agosto, con la inyección de DEG (Derechos Especiales de Giro) del Fondo Monetario.
Según un análisis elaborado por Romano Group, las reservas internacionales al 30 de agosto contaban con divisas por USD 7.356 millones en activo, con el aporte fundamental del desembolso de DEG (Derechos Especiales de Giro) efectuado la semana pasada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras que las reservas netas -descontados préstamos y encajes privados- alcanzaban los USD 4.476 millones negativos.