El Gobierno evalúa que el acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda de 44 mil millones de dólares tomados por la gestión de Mauricio Macri permite disipar incertidumbre y proyectar una "hoja de ruta" para que el presidente Alberto Fernández avance en el segundo tramo de gestión con foco en el crecimiento.
La reducción gradual del déficit fiscal, los avances para evitar saltos cambiarios y el entendimiento para preservar derechos laborales y previsionales fueron algunas de las claves de la negociación final destacadas en las últimas horas por funcionarios nacionales, pero también dirigentes, sindicalistas y empresarios de diferente sesgo ideológico.
"El acuerdo nos saca de la incertidumbre y nos permite seguir trabajando, tener una hoja de ruta para ocuparnos de una buena cantidad de temas que hacen a la vida de las y los argentinos. Nos permite estabilizarnos y seguir creciendo como lo venimos haciendo, pese a todos los obstáculos que tenemos", afirmó este sábado a Télam la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti.
La funcionaria indicó que el Gobierno hubiera "preferido no tener que estar en esta situación" con el organismo internacional, pero insistió en recordar que la administración del Frente de Todos (FdT) "heredó una deuda infame de 44.000 millones de dólares y tuvo que hacerse cargo" y avanzar en la búsqueda de un acuerdo.
En ese sentido, advirtió que, en comparación a anteriores acuerdos entre la Argentina y el FMI, el entendimiento anunciado el viernes "no compromete" la soberanía del país.
"Este es un buen acuerdo que no compromete nuestra soberanía. Durante cuatro años no vamos a tener que hacer desembolsos lo que nos permite recuperar el PBI", fundamentó.
Y explicó: "No celebramos, pero nos alivia pensar que salimos de esta nube negra que nos impedía mirar hacia adelante. Nuestra responsabilidad es gobernar y este principio de entendimiento nos permite empezar a salir de este desastre en que el nos metió Macri; es el principio de la solución".
El anuncio y el acuerdo
Esa línea de razonamiento fue la que eligió el viernes el Presidente para anunciar el acuerdo con un mensaje grabado desde la residencia de Olivos: "Teníamos una soga al cuello y ahora, un camino por recorrer. Podremos ejercer nuestra soberanía y llevar adelante nuestra política de crecimiento, desarrollo y justicia social".
Entre sus puntos centrales, el acuerdo con el FMI un sendero de reducción gradual del déficit fiscal primario, aumento del gasto en infraestructura y ciencia y tecnología y la continuidad de programas sociales focalizados, de manera de poder sostener la recuperación económica en curso en el marco de la pospandemia.
Las negociaciones entre el Fondo y el gobierno argentino fueron intensas -y duras en varios tramos- y se extendieron a lo largo de 16 meses, ya que comenzaron formalmente a fines de agosto de 2020, en uno de los momentos más complejos de la pandemia de coronavirus y una vez concluido el canje con los acreedores privados.
Entre las metas fiscales acordadas con el FMI, se plantea que para el año 2022 se proyecta un déficit fiscal primario de 2,5% del PBI; para 2023 de 1,9%; y para 2024, de 0,9%, según explicó el ministro de Economía, Martín Guzmán, en la conferencia de prensa del viernes que ofreció junto al jefe de Gabinete, Juan Manzur.
El Gobierno considera que estas pautas son alcanzables sin afectar el ritmo de crecimiento actual de la economía.
En esta línea, y a través de las redes sociales, Manzur sostuvo que el entendimiento alcanzado con el organismo permitirá "profundizar la recuperación económica ya iniciada" al conseguir "fortalecerlas obras de infraestructura, ampliando las capacidades productivas para generar divisas y consolidar el mercado interno".
En la oposición se destacó la concreción de este entendimiento como "un hecho positivo que le otorga previsibilidad al país", mientras se aprestan para debatir su aprobación en el Congreso.
El jefe de Estado dejó en claro en su anuncio que la intención de Ejecutivo era ratificar el acuerdo en el Parlamento, en lo que constituye un claro contrapunto con la fórmula utilizada por el macrismo en 2018 cuando tomó la deuda con el FMI.
La Mesa Nacional de Juntos por el Cambio emitió un comunicado titulado "Sobre el principio de acuerdo con el FMI", manifestó que "Juntos por el Cambio considera positivo este primer entendimiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que evita así un costoso default".
El comunicado se dio a conocer tras una reunión por zoom en la que participaron Patricia Bullrich (PRO), Gerardo Morales (UCR) y Maximiliano Ferraro (CC); el expresidente Mauricio Macri, el gobernador de Mendoza Rodolfo Suárez y el Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.
El gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, destacó en su cuenta de la red social Twitter como "un primer paso positivo" el acuerdo entre el Gobierno nacional y el FMI por la renegociación de la deuda al señalar que "es una buena noticia para el país".
Morales fue uno de los gobernadores de la oposición que admitió la magnitud de la deuda contraída por el gobierno de Macri en 2018 y envió a un funcionario de su gobierno a la reunión encabezada por el Presidente y Guzmán, donde se analizaron los avances en la negociación con el organismo internacional.
Mandatarios del oficialismo y la oposición provinciales respaldaron también el entendimiento al destacar que "no condiciona" el crecimiento y permite ponerle fin a "la incertidumbre" de entrar en la cesación de pagos.
No obstante, legisladores del oficialismo y de la oposición adelantaron que durante la discusión parlamentaria se debatirán los motivos del origen de la deuda que Argentina contrajo con el FMI.
El próximo martes, Fernández iniciará una gira oficial a Rusia y a China, países con los cuales buscará profundizar las relaciones bilaterales para concretar acuerdos en cooperación técnica e inversiones.
Y este periplo puede marcar el primer paso de una agenda de trabajo y planificación enfocada en afirmar la recuperación económica y la salida definitiva de la pandemia de coronavirus.
Fuente: Télam.