Sin una fuente oficial que admita cómo se filtraron los audios de Marcelo Sain, ni de pistas sobre el contexto al que pertenecen, se divulgaron en los últimos dos días fragmentos de grabaciones enviadas -seguramente por whatsapp- desde el celular del ex ministro de Seguridad de la Provincia de Santa Fe y ex titular del Organismo de Investigaciones del Ministerio Público de la Acusación.
Las publicaciones periodísticas que han revelado los audios, así como los medios que luego las reprodujeron, carecen de una información clave para establecer cuál es el valor de los dichos de Sain: el momento en que se realizaron. De todos modos, está claro que se trata de afirmaciones, imputaciones e incluso una autoincriminación que de ser cierta hubiera vulnerado derechos humanos elementales, que parecen expresadas en una conversación privada del ex funcionario del gobierno provincial y del Poder Judicial (que mantuvo esos dos cargos simultáneamente).
Sain es investigado por espionaje ilegal. De esa causa provienen las nuevas grabaciones. Se desconoce si ese material será o no parte de las pesquisas de los fiscales Mariela Jiménez y Ezequiel Hernández. Ambos allanaron en noviembre de 2021 las oficinas de esa cartera e incautaron bases de datos y teléfonos que ahora "se filtraron" según las publicaciones mencionadas. Hasta ahora no hay ningún imputado formal por esa causa.
Primero se divulgaron en Rosario audios que lo muestran como partidario de métodos violentos contra los ciudadanos y con amenazas a rivales dentro del MPA. En ellos habla de la posibilidad de detener a una funcionaria y generar un escándalo, se expresa con tono y palabras amenazantes sobre quienes lo investigan (para entonces seguramente ya ha dejado de ser el ministro de Seguridad), y llega a expresar que sería bueno que "a los rosarinos" el "Guille" (de la banda de los Monos) los "cague a tiros".
Morel y Arietti en la mira
"Hay que buscar un caso, tipo Ana Morel, detenerla, y ahí producir el escándalo". Morel es una funcionaria proveniente del Ministerio de Economía de la provincia, de confianza del titular de esa cartera Walter Agosto, que fue enviada a Seguridad justamente después de la salida de Sain como responsable de la administración financiera.
En otro audio, dice "Salí al balcón y había una mina paseando perros y la hicimos detener con los perros y todo; la vamos a dejar enjaulada, la vamos a dejar llorando doce horas sin comer y sin agua", señala Sain en lo que luce como una de expresión autoincriminatoria o una fanfarroneada que revela su pensamiento profundo. Y que de ser cierta vulneraría garantías básicas en materia de derechos humanos de los detenidos.
En un tercero nombra a Carlos Arietti, fiscal regional de Santa Fe, con quien mantenía un enfrentamiento. "Hay una denuncia de Arietti por espionaje ilegal, yo no tengo problema con eso. ¿Pero esto cómo va a terminar? Con violencia, porque a mí me gusta a los hijos de puta cagarlos a trompadas u otra cosa".
En otro, parece ironizar sobre la repercusión que causara su declaración a un medio porteño respecto de que ya no iba a Rosario "porque lo iban a cagar a tiros", en tono de (inconveniente) broma. "Qué maravilla boludo, la mariconeada de todo el progresismo putarraco de Rosario porque dije que los iban a cagar a tiros. Me encanta, que el Guille los recontra cague a tiros", sostiene el ex ministro.}
Rafaela
Otro audio con la voz de Sain parece recoger una conversación, o un mensaje a un interlocutor no identificado: "La política engorda a estos tipos. El otro día me quería convencer Omar que tenía que juntarme con Perona y el habló una hora a Perona. Por supuesto, terminó Perona de hablar con Perotti y difundió a cuatro vientos, después me enteré, de que había hablado una hora con el gobernador. Es pueblerino, Santa Fe es un gran pueblito y tiene un sistema político de mierda, pueblerino, aldeano", dice el ex funcionario, no se sabe cuándo. ni a quien, ni el propósito de sus expresiones, sobre el titular del Poder Ejecutivo Provincial junto al apellido del fallecido "rey del juego ilegal en Rafaela" según la expresión que se repite en esa ciudad.
Fuente: El Litoral