"Hace apenas dos años y medio, en junio de 2022, el mercado de futuros de Chicago negociaba contratos por soja en US$650/t, récord nominal para la plaza norteamericana. El último día de operaciones del 2024, sin embargo, apenas alcanzó valores de US$371/t; ello es, 22% por debajo del precio del 31 de diciembre de 2023″.
Así inicia un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario sobre una pizarra internacional que está directamente vinculada con las expectativas de ingresos de divisas para la Argentina, y con las crecientes presiones de los productores que le advierten a Javier Milei que en ese nivel de los commodities, con el tipo de cambio vigente, las retenciones son sinónimo de quebrantos para los productores.
Blas Rozadilla, Matías Contardi y Emilce Terré -los autores del informe- señalan que "el resto de los commodities agro no han corrido mejor suerte, con excepción del maíz que recortó pérdidas las últimas semanas del año de la mano de los recortes en la oferta mundial y una sostenida demanda de exportación para el suministro estadounidense.
"Específicamente, los US$ 203/t a los que cerró el futuro de trigo en Chicago la última rueda del 2024 se encuentra un 12% por debajo del año anterior, en tanto que el maíz cerró el año a US$ 181/t, un 2% por debajo de diciembre de 2023″.
El reporte expone que los valores promedio de diciembre 2024 para soja, maíz y trigo, comparados con los precios vigentes en diciembre de 2022, "la situación se asemeja para los tres principales granos, con caídas del orden del 30%.
"En términos nominales, el trigo, el maíz y la soja han tocado sus valores nominales más bajos desde 2020, mientras que, a precios reales, el poder de compra de los granos tocó su valor más bajo en 18 años".
Lo que viene
Para la nueva campaña 2024/25, los autores señalan que la producción mundial de trigo como de maíz "se prevén menores a las del año anterior, en el primer caso por los problemas productivos en Rusia y Europa, en tanto que en el segundo se suma también una caída en el suministro Sudamericano.
"La soja, en cambio, continúa sumando hectáreas y kilos y se prepara para romper nuevamente su récord de oferta por tercera campaña consecutiva, explicando así por qué los precios han caído más que proporcionalmente con relación a los cereales".
Explican que "sumado a los mencionados factores fundamentales, las respectivas entradas y salidas de dinero de las grandes administradoras de fondos especulativos a los mercados de granos han sumado un condimento adicional a los vaivenes de precio. Al cierre del 2024, las apuestas de los especuladores permanecen bajistas para soja, en tanto que en maíz la posición neta ha virado recientemente a alcista, y se mantienen neutros en trigo".
Por último, en el caso del maíz específicamente, luego de alcanzar la posición neta vendida más grande de su historia a mediados de 2024, desde el mes de julio los fondos compraron el equivalente a 65 Mt de maíz en contratos de futuros, para posicionarse a inicios del 2025 netamente comprados en maíz.
Poder de compra
Según las proyecciones de la BCR, el poder de compra de los granos cierra en 2024 en la plaza local a su valor más bajo desde el 2017 para soja y trigo, en tanto que el maíz cotiza en mínimos desde 2020.
Biocombustibles
"Una luz de alerta será la marcha de la política de biocombustibles en Estados Unidos, ya que no está claro el impulso que quiera darse en la materia a mediano y largo plazo. Esto tendrá un efecto sobre la cotización de los aceites vegetales, incluido el de la soja a mediano plazo".
Los productores con números en rojo
"Más allá de la reciente recuperación en las cotizaciones por maíz, la película para los precios agro durante 2024 dejó números en rojo para todos los commodities, impactando en las cotizaciones locales".
Tras los default de Los Grobo, Agrofina y Surcos, quedó en evidencia que las cadenas tienen problemas de liquidez. Desde Federación Agraria Argentina (FAA) reclamaron una quita de retenciones "de manera urgente" para poder recuperar rentabilidad ante la suba de costos y precios internacionales en baja.
"Hemos sembrado la gruesa con altos costos de insumos, arrendamientos muy altos, precios internacionales deprimidos y ese panorama con una alta carga fiscal es bastante desolador, lo números no dan", dijo Andrea Sarnari, presidenta de Federación Agraria.
Según el reporte de la Bolsa rosarina, a este escenario microeconómico "hay que sumarle la particularidad macroeconómica del último año, con una inflación elevada a principios del 2024 que, si bien se desaceleró fuertemente con el correr de los meses, aún registra en noviembre una suba interanual del 166%.
"Simultáneamente, la caída del dólar financiero ha recortado el tipo de cambio al que se liquidan las exportaciones agrícolas, conocido como "dólar blend".
Con información de El Litoral