Los números de la provincia estuvieron otra vez en el centro de la escena en la penúltima semana de gestión. En un país en el que se volvió noticia si las jurisdiccionales subnacionales pueden o no pagar los aguinaldos, Santa Fe protagonizó una mini disputa por ese aspecto puntual, y una sutil controversia sobre sus finanzas, en general.
El lunes, funcionarios de la gestión entrante abrieron el marcador contándole a la sociedad que la administración de Maximiliano Pullaro pagaría los aguinaldos, pero que ello requeriría de "mucho esfuerzo". El martes, el actual ministro de Economía, Walter Agosto, igualó diciendo que en rigor, sería la gestión de Omar Perotti la que dejaría "en un plazo fijo" el dinero necesario para cumplir con esa obligación; "no van a tener que salir a buscar la plata", puntualizó. El miércoles, su sucesor a partir del 11 de diciembre volvió a sacar ventaja; Pablo Olivares retrucó que el pago de aguinaldos no es la única obligación del Estado. "Hay que pagar a contratistas y proveedores, y atender a municipios y comunas", planteó. Y aclaró que el estado de la provincia "no se reduce a un resultado financiero" (superavitario o deficitario), sino que hacen a él la situación de sus rutas, escuelas y hospitales. Sumó expresiones similares el futuro ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, cuando alertó sobre "la preocupante" situación de la Administración Provincial de Vialidad y de ASSA por "su déficit e ineficiencia".
La jugada siguiente volvió a estar a cargo de Agosto. El ministro apeló a una práctica poco usual en su gestión; convocó a conferencia de prensa para describir de manera pública el estado financiero de la provincia que entrega. Lo hizo mientras Omar Perotti permanecía en Buenos Aires. Agosto enunció datos sobre activos y pasivos, nivel de deuda y disponibilidad; dijo que el Tesoro dispone de 271.000 millones de pesos contra una deuda flotante 233.600 millones. "La situación es buena", resumió. Sí admitió que cerrará el año con un déficit de 70 mil millones, producto de efectos circunstanciales como la sequía y el aguinaldo que se deberá abonar. La cifra es menos de la mitad del déficit del que había hablado hace ya dos semanas Pablo Olivares, cuando sostuvo que el rojo que heredaría sería de entre "160 y 200 mil millones". Pero Agosto evitó entrar en polémica; "hay que ver qué conceptos se suman y tienen en cuenta para calcular el saldo", respondió al ser consultado por El Litoral sobre la aparente incongruencia. Una actitud similar a la que adoptó el futuro gobernador: "Mostramos una foto, y esto no es hablar mal de Perotti o de Agosto, ni decir que hicieron una mala administración", dijo Maximiliano Pullaro, cada vez que aludió al tema.
El futuro mandatario recibió el miércoles su diploma como gobernador electo, al igual que legisladores, intendentes y concejales. Y cerró la semana con un acto en el que arengó a todo su futuro equipo de gobierno para que "den la vida" en pos de "resolver los problemas de la gente". Los diplomas entregados fueron definidos por el propio presidente del Tribunal Electoral, Daniel Erbetta, como "los más importantes a los que un ciudadano puede aspirar porque son los que otorga el pueblo". Sin embargo, en la ceremonia hubo ausentes, entre ellos el actual gobernador Omar Perotti.
con información de El Litoral