En vísperas del vencimiento -este martes 16 de enero- de la conciliación obligatoria vigente entre SanCor y ATILRA, dispuesta por el Ministerio de Capital Humano de la Nación, trascendió un fallo del Juzgado en lo Civil, Comercial y Laboral N°5 de Rafaela por el cual la justicia rechazó una medida autosatisfactiva solicitada por el gremio y determinó la remisión del caso a la cartera nacional, donde se dirime un largo conflicto entre las partes.
Durante la feria judicial en curso, y tras un conflicto que implicó la paralización por 65 días de la láctea, ATILRA presentó en los tribunales rafaelinos una acción judicial con objetivo de proteger los derechos laborales de los trabajadores que se desempeñan en la firma. Estas medidas incluían prohibiciones, restricciones y/o abstenciones por parte de SanCor con el objetivo de evitar que la empresa realice ciertos actos que podrían afectar la capacidad de pago de las obligaciones laborales de causa anterior a la presentación, así como proteger los activos tangibles e intangibles de la empresa.
Con fecha del 9 de enero pasado, el magistrado Lucas Marín determinó que no se cumplían los requisitos necesarios para la adopción de medidas autosatisfactivas. En particular, de imposible o difícil reparación ulterior que justificara la adopción de las medidas solicitadas. Además, advirtió que la entidad sindical reconoció que se encuentra en instancias de conciliación con SanCor y que la firma efectuó una propuesta de pago hacia futuro. Por lo tanto, el juez consideró que existen otras vías para proteger los derechos laborales de los trabajadores afectados y que las medidas solicitadas tenían todos los visos de una cautelar más que de una autosatisfactiva, lo que invalida su planteo y cierra el análisis.
"Literalmente viene a destruir el mensaje, el discurso público de ATILRA", señaló una fuente vinculada a la cooperativa láctea tras conocerse el fallo judicial. Desde su óptica, "el juez está refutando toda la posición que tiene ATILRA sobre Sancor". Incluso considerarón que "los desnuda en sus verdaderas intenciones".
Desde la láctea explicaron que, en su fallo, el juez determina que los reclamos implicarían una paralización de la empresa; y que si así ocurriera no podría lograrse ninguna recuperación que haga posible atender los reclamos gremiales. También interpretan que "no se observa una gravedad como la que plantea el gremio" y que "los argumentos son endebles, ni presentan pruebas" que acrediten los hechos que se denuncian. "Y que habiendo una conciliación, reconocida por el gremio; más propuestas hechas por la empresa, no es conducente darle curso al pedido", remarcaron.