Una campaña de 136 millones de toneladas, con 59,8 Mt en exportaciones de granos y 36Mt más en aceites y subproductos al exterior. Esa es la proyección de la Bolsa de Comercio de Rosario para la campaña 2023/24, que incluye un consumo en chacra de 21,7Mt y otros 13,9 Mt para balanceados y otros destinos.
La quinta versión del "dólar soja" (o agro) es un intento de Economía para que parte de lo que queda en silos se "adelante" a las elecciones. Al nuevo gobierno le espera un ciclo que -lluvias mediante- aportaría al país un ingreso de divisas de US$34.300 millones. "Ello es casi US$10.000 millones más que el ciclo anterior y marca el tercer mejor desempeño, detrás de los ciclos 2020/21 y 2021/22″, pronostica el informe, tomando valores actuales.
Son los productores del agro los que hacen funcionar la principal "imprenta de dólares" que tiene la Argentina, con trabajo e inversiones mediante y a pesar de la fuerte presión fiscal.
A través de su Dirección de Informes y Estudios Económicos (Diyee) la Bolsa rosarina estimó un crecimiento del 70% interanual tras la "catastrofica sequía". La producción recuperaría más de 50 millones de toneladas (Mt), "con exportaciones de granos que se duplicarían respecto del ciclo anterior".
Detalla el informe que "el salto más importante se refiere a soja, que viene de tener su peor campaña del siglo", con un crecimiento interanual del 138,8% para alcanzar Mt.
"La producción seguiría siendo liderada por el maíz, que nuevamente sería el principal cultivo de Argentina, con 56 Mt (+64,6% interanual). En tercer lugar aparece el trigo con 15,6 Mt (+35,7% ia)".
Los autores del informe aclaran que todo depende de la evolución de "El Niño", cuyo pronóstico debe ser corroborado por agua disponible en los suelos, si se cumplen las lluvias que el fenómeno supone.
La sequía "sigue ahí"
Advierten los especialistas de la BCR que "la sequía aún sigue dejando su marca. Por el lado de los cultivos de invierno, la falta de precipitaciones en junio ha tenido un impacto negativo en la superficie sembrada. En el caso del trigo, el área implantada se ubicaría en 5,4 millones de hectáreas (M ha), 500 mil hectáreas por debajo de lo que se había sembrado en la 2022/23.
"Pese a las malas condiciones que se tienen como punto de partida en la actual campaña, los rindes serían considerablemente superiores a los de la campaña pasada -según informó recientemente la Guía Estratégica para el Agro-, ya que en términos generales las reservas de agua útil en los suelos son mejores a las del año previo (exceptuando la franja oeste), lo que permite que los cultivos se desarrollen en mejores condiciones".
En relación con los cultivos de verano, "el escenario es todavía incierto. La sequía en el oeste de Argentina es alarmante, lo que profundiza la problemática de falta de reservas a menos de un mes de la siembra maicera". De manera preliminar, "se proyecta que el área sembrada con maíz y con soja se ubique en 8,7 y 16,1 millones de hectáreas, respectivamente, ambas aumentando cerca del 1% interanual".
Fuente: El Litoral