Nació en Recreo, una ciudad de 14 mil habitantes situada a 17 kilómetros de la capital de Santa Fe, a donde se mudaría a los seis años. Allí comenzó a jugar al fútbol en Unión para, luego de transitar todas las Inferiores, debutar en Primera en 2019. Toda una vida en el club. Por eso, para Gastón González, de 20 años, no fue un partido más el clásico del último sábado que el Tatengue ganó por goleada, y que lo tuvo al propio Tonga como figura. Lo palpitó como hincha, lo jugó como hincha, y lo festejó como hincha. Y le contó todo a Olé.
-Hay un video tuyo festejando con la gente luego del partido, como si fueras uno más…
-Ja, sí. Tenía la promesa hecha hace una semana: mis amigos me jodían con que vayamos a festejar. Es algo que yo hice toda mi vida desde que voy a la cancha: ir dos horas antes del partido y si ganamos ir a festejar, lo de la otra vez fue una más de tantas. Igual no pensé que iba a haber tanto quilombo, je, pero el cariño de la gente se notó.
-¿Tuviste problemas?
-Naa, no hubo quilombo ni nada. Pero cuando llegué me empezaron a pedir fotos por todos lados y se armó un tumulto. Me trataron re bien, me cantaron, y ese amor que me dieron no me lo voy a olvidar nunca.
-Ganaron un clásico 3-0, ¿son conscientes de lo que significa?
-Fue una locura, fue demasiado, los pasamos por arriba. Ahora que estoy más tranquilo y tengo la cabeza fría voy cayendo, uno en el momento no toma dimensión de las cosas pero van pasando los días y te vas dando cuenta. Es una emoción enorme para nosotros en el plantel, para las familias de todos los chicos, y ni hablar para la gente que tanto quería ganar.
-¿Por qué hubo tanta diferencia?
-Creo que dimos una muestra de actitud, de carácter y de sacrificio enorme, y es ahí donde hicimos la diferencia. Fuimos ordenados e inteligentes, Colón en ningún momento se sintió cómodo y las que nos quedaron las supimos aprovechar.
-Era ganar o ganar para ustedes, ya que se jugaban un lugar en la Copa, ¿cómo les jugó eso?
-Nos sirvió mucho el partido anterior porque nos habíamos puesto en la cabeza que teníamos que ganar sí o sí y nos jugó en contra. Durante la semana lo manejamos muy bien, hubo charlas, tratábamos de despejar la mente. Sabíamos que era muy importante pero emocionalmente lo trabajamos muy bien y ahí estuvo otra diferencia.
-Vos sos hincha de Unión, ¿Qué sentiste?
-Jugar como hincha es otra cosa, varios de acá lo somos. Soñábamos jugar un clásico así en Primera, con nuestra gente, y encima ganar 3-0 y meternos en la Sudamericana, que era el objetivo. Es un premio al esfuerzo de todo el año.
-Fue tu primer clásico con gente, ¿Cómo lo viviste?
-Es algo que había soñado desde muy chico, hasta hace dos años yo veía los clásicos en la tribuna, y vivirlo desde adentro, que es lo que todo hincha sueña, fue muy lindo. Durante la semana me jugó un poco en contra pensar que era un partido que había soñado toda mi vida pero gracias a Dios ganamos y me tocó convertir. Era un objetivo personal hacerle un gol a Colón.
-¿Y qué pasó por tu cabeza en ese instante?
-En el momento se me cruzaron miles de cosas…. Estoy desde chico en el club, le había hecho varios goles a Colón en Inferiores, pero hacerle uno en Primera, y de la forma en que se dio todo… Y entrar a una copa, la verdad que estoy muy feliz y ojalá me sigan pasando estas cosas.
-Hubo una dedicatoria especial en el festejo…
-Sí, para mi vieja que estaba en la tribuna, justo ese día era su cumpleaños. Por suerte salió todo redondo.
-En la cancha quizás no se notó pero en la previa, ¿Sentían una presión extra por el campeonato que ganó Colón?
-Sabíamos lo que había logrado Colón pero los clásicos son partidos parte, y quedó demostrado. Lo jugamos con el corazón y se notó mucho la diferencia entre los dos equipos. Nosotros tenemos un plantel más joven y sentimos más la camiseta que ellos.
-¿Y no los motiva a pensar que ustedes también pueden salir campeones?
-Sí, obvio. En mi opinión Colón hizo bien las cosas y por primera vez en su historia salió campeón y eso motiva a los que no lo han hecho a lograr cosas importantes. Nosotros siempre tenemos la ilusión de pelear arriba y ojalá el año que viene, que tenemos varias competencias, podamos hacerlo.
-Van a jugar la Sudamericana, ¿va a ser el gran objetivo de 2022?
-Sí, obvio, nos volvemos a ilusionar. Tenemos también la Liga y la Copa Argentina, vamos a tener chance de jugar todos que es lo importante. La idea es tratar de pelearla, de quedar lo más alto posible y llegar más lejos de lo que hemos llegado otras veces. Ahora toca descansar y cuando volvemos, ponerse a trabajar.
EL DÍA QUE CONOCIÓ A MESSI
-Tenés una foto con Messi, ¿Cómo se dio?
-Otro de los sueños que cumplí en mi carrera y siendo tan joven. Me tocó ir de sparring con la Selección y estar al lado del mejor del mundo, fue una de las mejores cosas que me pasó, la tengo en un cuadrito en casa, no me puede faltar esa foto.
-Hay muchos que cuentan que no se animan a pedirle, ¿cómo hiciste vos?
-Yo tampoco me animé, ja. Me llamó el fotógrafo y me dijo “Aprovechá ahora que terminaron de entrenar”. Yo antes de ir pensaba que al primero que le iba a pedir era él, pero al momento de tenerlo al lado no sabés qué decirle.
-¿Y pudiste compartir en la cancha con él?
-Sí, tengo una foto también en la que estamos haciendo un fútbol reducido. La verdad que estar en una cancha con él… pensé que nunca me iba a pasar, por más que haya sido un entrenamiento, es algo que no me voy a olvidar nunca.
Fuente: Diario OLÉ