Es la imagen del día en Barcelona, todos hablan de él. Lionel Messi regresó de sus vacaciones en Miami y el Caribe y ahora todas todas las expectativas están puestas en su futuro profesional. El vuelo privado del crack rosarino aterrizó esta mañana en el Aeropuerto de El Prat. Primero bajó su familia -esposa e hijos- y luego la Pulga, con un barbijo, una gorra, una remera y una bermuda, vestimenta habitual en él.
En total, fueron 63 días de ausencia entre las vacaciones y el título de la Copa América en Brasil. Rodeado por su seguridad, Messi salió sin inconvenientes de la terminal y recibió el cariño de los hinchas, a quienes les firmó unos botines y una camiseta de Barcelona ante de subirse a la camioneta que lo esperaba para trasladarlo a su domicilio de Castelldefels.
Desde el 1 de julio, Lionel Messi vive una situación inédita en su carrera debido a que se encuentra con el pase en su poder. Igualmente, todo hace indicar que seguirá en Barcelona y en España hace un tiempo aseguraron que ya hay un principio de acuerdo entre las partes.
Según Diario Sport, uno de los periódicos más importantes de Cataluña, Barcelona y Messi tienen un preacuerdo de cinco años de contrato y una rebaja del 50 por ciento del salario del argentino.
La decisión del rosarino de aceptar esta rebaja llega a raíz de su comprensión respecto de la situación económica que atraviesa Barcelona y quiere dar el ejemplo, según expresaron desde España.
Por lo pronto, es tan solo un principio de acuerdo y la situación no está resuelta, ya que Messi revisará todo a su regreso de las vacaciones. Mientras tanto, los abogados del club deberán terminar de darle forma al nuevo contrato, que además tendría una cláusula de rescisión de 350 millones de euros.
Hasta el momento, ni Messi ni su entorno familiar se han pronunciado públicamente sobre las negociaciones con Barcelona. Si todo sale bien para Joan Laporta y Ronald Koeman, la Pulga debería sumarse a la pretemporada del conjunto catalán el 2 de agosto, fecha en la que también regresarán Sergio Agüero y Emerson, otros de los que jugaron la final de la Copa América 2021.
Barcelona jugará el próximo 8 de agosto por el torneo Joan Gamper ante la Juventus de Paulo Dybala y Cristiano Ronaldo, oportunidad en la que los dirigentes catalanes esperan contar con Messi.