El latiguillo del Pollo Vignolo que se convirtió en meme hace tiempo atrás se hizo realidad. Boca ante la dura lesión que sufrió Toto Salvio, comenzó a pensar en refuerzos para el ataque y apareció el nombre de Luis Miguel Rodríguez, hincha bostero de chiquito que en junio queda libre de Colón. ¿Y si te llama Román, Pulga? “La verdad es que uno cruza los dedos y ruega porque se dé. A mí me gusta Boca, fui simpatizante, o lo soy, aunque al estar jugando uno va dejando de lado ese fanatismo”, contó el delantero de 36 años en una extensa entrevista que le brindó a Olé.
“Atlético Tucumán es el lugar que me dio todo y es la única camiseta que besé”, remarcó también sobre el club donde más tiempo jugó. Y enseguida dijo que no está muy al tanto de cualquier negociación que pueda haber, aunque en el Xeneize saben que al haber firmado planilla no podrían incorporarlo inmediatamente: “Trato de no meterme tanto en estos temas porque puede salir para cualquier lado. Me enfoco en pensar y estar al 100% para el próximo partido con Colón, en hacer las cosas aún mejor. Pienso en hacer goles y asistir”.
Sin cassette, como fue toda su charla, dejó en claro que no le teme al DNI. “Las cosas llegan cuando llegan. Sería muy lindo poder elegir en qué momento pasa cada cosa, pero no es así. Si está la posibilidad y se da, bárbaro. Yo estoy al 100% físicamente, me siento bien y podría hacer muchos goles”, aseguró.
Y claro, hasta pagar una cuenta pendiente personal: “A Boca lo seguía de chico, pero nunca fui a la cancha porque no tenía para viajar, así que a La Bombonera las veces que fui fue para jugar o entrenar. Pero nunca pude hacer un gol ahí… Ojalá me toque hacerlo con la de Boca para poder festejarlo, je”.
Y claro, hasta pagar una cuenta pendiente personal: “A Boca lo seguía de chico, pero nunca fui a la cancha porque no tenía para viajar, así que a La Bombonera las veces que fui fue para jugar o entrenar. Pero nunca pude hacer un gol ahí… Ojalá me toque hacerlo con la de Boca para poder festejarlo, je”.
Aunque por ahí la historia no es tan conocida, hace más de diez años, Boca también buscó llevarse al punta tucumano. “Cuando tenía 23 años estuve muy cerca, pero no se dio. Por ahí no dimensioné o no pensé del todo bien. Creo que en ese momento no hice la fuerza necesaria para poder ir. Estaba en Atlético, recién empezando, dando los primeros pasos y pensé que después iba a tener otra posibilidad… Es difícil ingresar en los clubes grandes porque por ahí buscan a jugadores con experiencia en el exterior o nombres importantes. Pero no me arrepiento de nada de lo que hice en mi carrera. Estoy muy contento con todo lo que hice, estuve y estoy feliz…”, recordó.
Toda la circunstancia sobre este interés de Boca por él es aún más especial por la presencia del Vice. “Yo agarré la época de Bianchi, cuando Riquelme era el distinto y Palermo hacía prácticamente todos los goles. También me sorprendía Clemente, que después lo tuve de compañero en Colón, el Chelo, Palacio… “, comentó. ¿Hubo charla con JR? “No, nunca hablamos. Sí tengo una camiseta de él que me trajo el Chelo Delgado cuando se hizo el juego de las estrellas en Tucumán, que la tengo guardada. Y yo le mandé la mía de Atlético”.
En una de esas, los próximos días o meses, antes de mitad de año, esa conversación pendiente se dé: “Yo ni siquiera tengo el número de teléfono de Riquelme, pero obviamente me gustaría mucho que esté ese llamado, aunque sea para conversar. En junio me quedo sin contrato, así que veremos qué hacer…”.
Fuente: Olé.