Muchas veces se dice en el tenis que luego de una gran victoria, al siguiente partido cuesta mucho lograr repetir esa actuación, ya sea por los nervios, la tensión, la adrenalina o diferentes factores y sensaciones que pasan por la cabeza de un tenista.
La histórica victoria de hace menos de 24 horas de Nadia Podoroska sobre su ídola Serena Williams trajo mucha repercusión a nivel mundial, y tener que enfocarse en disputar un nuevo encuentro con todas las miradas puestas en uno, no debe ser fácil.
Y es que hoy la rosarina no pudo aprovechar el envión anímico que traía tras haber logrado el triunfo más resonante de su carrera y quedó eliminada del abierto de Roma, al perder en los octavos de final con la croata Petra Martic por 3-6, 6-1 y 6-2 en una hora y 59 minutos de juego.
Sin dudas que quedará en la historia, una vez más, lo hecho esta semana por la rosarina de 24 años, quien a partir del lunes será número 41 del mundo, alcanzando la mejor posición en su carrera.
Por Andres Ghisolfo
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