Alfredo Cahe, el histórico médico que acompañó a Diego Armando Maradona durante tres décadas y atendió a otros famosos durante su carrera, murió este viernes a los 80 años.
“Con profundo dolor despido a mi querido amigo Alfredo Cahe, reconocido por sus cualidades profesionales y humanas”, escribió Daniel Scioli, secretario de Ambiente, Turismo y Deportes, en sus redes sociales, confirmando la noticia del fallecimiento del galeno.
Cahe conoció a Maradona por intermedio de quien fuera su primer representante, Jorge Cysterpiller. A partir de allí generó un fuerte vínculo con el Diez y estuvo a su lado en momentos difíciles de su vida. Episodios como la internación de urgencia de Maradona en Punta del Este, en el año 2000, o la de cuatro años más tarde, en una clínica porteña por otro cuadro grave, encontraron a Cahe asistiéndolo.
Más acá en el tiempo, cuando la resentida salud de Maradona derivó en su muerte, el 25 de noviembre de 2020, Cahe lanzó duras críticas contra los médicos que trataban al astro futbolístico. Fue durante una entrevista realizada en febrero de 2021, en la que también contó que no podía ver a Maradona debido a que su entorno le cerró las puertas.
“Cuando lo vi a Diego vivo en la Clínica Olivos, prácticamente dopado y dormido, no pude hablar con la psiquiatra ni con el psicólogo. Se me cerraron las puertas. La única vez que lo vi a Diego, lo vi dormido profundamente. Y el segundo día que lo iba a ir a ver, ya se había producido el suicidio. Digo suicidio porque para mí fue un suicidio lógico. Diego estaba cansado… para mí, todos estos acontecimientos de Diego fueron como consecuencia de un suicidio. Me acuerdo que una de las mujeres me dijo ‘no quiere vivir más, está cansado de la vida. Ya hizo todo’, y cuando salió de la habitación se me comunicó que Diego estaba muerto”, fueron las duras palabras de Cahe en ese reportaje.
Antes del desenlace fatal, Cahe había sugerido volver a intentar con una internación en Cuba, tal como había ocurrido a principios de siglo. Pero su propuesta no fue atendida por el círculo íntimo de Maradona.
“No pude convencer a Luque de llevar a Diego a Cuba. Me cerró las puertas de la… Bueno, en realidad no era una clínica ni nada, era un lugar donde Diego estaba prácticamente tirado. Lo importante de todo eso es que, en la poca conversación que teníamos, yo le sugerí a Luque que era importante e imprescindible llevarlo a un lugar adecuado previo, acá en la Capital, y después sí dar el segundo paso y llevarlo a Cuba, donde teníamos todo a favor”, agregó.
En otra entrevista, de las últimas que dio, Cahe había dicho que estar “al lado de Diego durante 30 años fue una responsabilidad muy grande, porque Diego siempre confió en mí. Yo no fui a buscarlo, él me eligió a mí. Yo traté de darle lo mejor con los mejores recursos médicos. Dios le dio a él una magia en el fútbol y en su vida personal que yo conocí muy sorprendente”.