Afuera de la pelea por el título en la Liga Profesional, el Xeneize cuenta con dos vías para lograr la clasificación al máximo certamen continental del próximo año: ganar la Copa Argentina -el miércoles se medirá con Vélez en semifinales- o acceder a través de uno de los tres pasajes que entrega la tabla anual.
Justamente en esa disputa la Academia se posiciona por encima de Boca, pero al haber logrado el título internacional se aseguró de manera directa el derecho a disputar la Libertadores y liberará un cupo. Lo mismo que ocurrirá si Vélez termina coronándose en el plano local.
Desde el momento en que Racing se coronó campeón, el primer favorecido fue Talleres, que ingresó ahora en el lote de los clasificados momentáneamente a la Libertadores por ese cupo que libera Racing. Talleres tiene 63 puntos y Boca tiene 60.
A Boca le queda, como se dijo, la posibilidad de clasificar a la Libertadores siendo campeón de la Copa Argentina. Pero si no lo logra, puede darle una mano importante Vélez, que es el equipo con mejor puntaje en la anual pero que tiene también dos chances más de entrar en la Libertadores: ser campeón de la Liga Profesional o ser campeón de la Copa Argentina.
Como está planteada la situación en este momento, suponiendo que Vélez gane el torneo de la Liga Profesional y Boca gane la Copa Argentina, estaría entrando Huracán, que tiene apenas 3 puntos más que Unión y con un partido más, porque ya jugó el partido de esta fecha (empató con Boca) y Unión debe jugar el martes con Talleres.
Pero automáticamente, se irán liberando cupos hacia abajo de equipos que clasifiquen a la Sudamericana. Unión está décimo, pero con el título de Racing habrá un cupo más y clasifican hasta el undécimo, con la chance concreta de que un título de Vélez abra paso para que entre uno más (hasta el duodécimo).