Todo parece ir viento en popa en Vélez, que el pasado viernes consiguió un valioso empate 1-1 en el Monumental para mantenerse como único líder de la Liga Profesional. Sin embargo, en el medio del partido y con las pulsaciones a mil tuvo lugar una pequeña tormenta: los enojos de Elías Gómez y Claudio Aquino tras ser sustituidos. El primero de ellos se mostró muy molesto con Gustavo Quinteros, a quien le dijo "cagón" mientras se retiraba del campo de juego. Ya desde las declaraciones posteriores al encuentro quedó en claro que existió un pedido de disculpas y un mea culpa interno que ya dejaba la relación en los mejores términos, pero el entrenador había advertido que por el insulto igual correspondía una sanción deportiva. Este miércoles el cuerpo técnico tomó una decisión al respecto: no concentra para el duelo ante Belgrano.
A mediados de semana, con el encuentro frente a Belgrano de este sábado en el horizonte, ya se había vislumbrado un once sin el lateral izquierdo, por lo que todo indicaba que iría al banco de los suplentes dejándole a Aaron Quirós su lugar en una formación que sale de memoria. Pero este viernes se confirmó que el castigo fue más allá: el ex River ni siquiera concentra. Decisión un tanto extrema, teniendo en cuenta que no quedan jugadores en esa posición en la nómina de citados y, ante cualquier eventualidad, habría que correr a la banda a Valentín Gómez a una posición inusual o improvisar con algún reemplazo a perfil cambiado.
El incidente de Elías Gómez con Quinteros
El altercado se produjo cuando, a los 11 minutos del segundo tiempo, el técnico decidió cambiar Gómez por Quirós, quien puede jugar en esa posición pero tiene características mucho más defensivas. El lateral explotó contra Quinteros mientras caminaba hacia el banco de suplentes: "Cagón, ahora vamos a hablar".
Luego del partido, ya en frío, se disculpó por el exabrupto: "(Quiero) Pedir disculpas, ya lo hablé con él, es un momento de calentura, nadie quiere salir de un partido tan importante. Sentí que quería revertir la situación porque sé que la jugada del empate viene por mi lado, justo donde entró (Pablo) Solari. Me sentí muy responsable por eso, y no poder revertir esa situación porque salgo me agarró en caliente. Lo hablé con él, con los chicos, pedí disculpas. No soy así, no salgo a hablar nunca, sí pedir disculpas cuando siento que hago algo mal, así que quedó más que aclarado".