Sonrisa, festejo y golazo. La combinación es la ideal y el PSG disfrutó de una gran jornada de Lionel Messi y de una goleada 5-1 ante un rival intenso como es el Lille. El N° 30 estuvo muy encendido para dejar atrás la bronca de la eliminación en la Copa de Francia. Manejó, asistió y convirtió picándosela al arquero para conseguir su segundo gol en Ligue 1 y el primero como visitante desde que está en PSG.
El triunfo fue contundente y la actuación también. Muy diferente a la jornada de poco vuelo vs. Niza y los penales de la última vez. Leo estuvo acompañado con Kylian Mbappé y Ángel Di María y hubo buenas conexiones. Aunque el partido se abrió con un blooper del arquero croata Ivo Grbic al que se le escapó un centro y Danilo Pereira hizo el 1-0 de los parisinos.
Hubo reacción del Lille, que empató tras un jugadón de Ben Arfa y definición de Botman. Pero no cambió los planes de un PSG con variantes. Y la diferencia llegó desde los pies del Balón de Oro. Porque Messi metió un corner filoso al área, el arquero la vio pasar y Kimpembe gritó el 2-1. Y después sí llegó la joyita para el 3-1. Mbappé no pudo en el borde del área pero Lionel sí, se la llevó y se la picó levemente a Grbic para salir a gritarlo.
Ahí se rompió la paridad del partido. Porque los Dogos hasta habían exigido a Donnarumma pero el gol de Messi fue letal y además hizo crecer a todo el PSG. Y casi hace otro porque en la última de ese PT reventó el travesaño con un tiro libre.
En la segunda mitad siguió el mismo desarrollo. Messi libre como conductor de un PSG con muchas opciones y variantes. Danilo Pereira con un desvío de por medio selló el 4-1 y su doblete. Mientras que el quinto fue obra de Mbappé, que no quería quedarse afuera de la fiesta y clavó un derechazo bárbaro al ángulo.
PAREDES, EN GRAN NIVEL
En definitiva fue una victoria crucial para el PSG a nueve días de recibir al Real Madrid por los octavos de ida de la Champions. Mauricio Pochettino se pudo ir conforme con el 11 que puso y en el que Leandro Paredes se hizo una de las grandes figuras. Con mucha recuperación de pelotas, quites y pases clave. Una revancha tras haber sido uno de los que falló su penal ante el Niza.
La mala, por supuesto, fue la lesión de Ángel Di María. Sufrió un patadón y salió tocado con Poche y todo París esperando que no sea algo serio y pueda estar contra los Merengues el martes 15/2.
