La Selección de Croacia empató 0-0 con Bélgica y este resultado le alcanzó a los croatas para clasificarse a los octavos de final del Mundial de Qatar como segundos del grupo F.
Más allá del 0-0, fue un partido electrizante de principio a fin. En la etapa inicial, los balcánicos tuvieron varias oportunidades para abrir el marcador, pero tanto Ivan Perisic como Andrej Kramaric no pudieron con los guantes seguros de Thibaut Courtois. Incluso, el último subcampeón del mundo contó con un penal a favor por una falta de Yannick Ferreira Carrasco en el área grande, aunque el árbitro Anthony Taylor, a instancias del VAR, decidió no sancionarlo por un offside de Dejan Lovren en el arranque de la jugada.
Urgido por una victoria que lo depositara en la siguiente instancia del Mundial, Bélgica cambió la cara en el complemento e inquietó varias veces el arco de Dominik Livakovic. Sin embargo, no fue la noche de Romelu Lukaku en Qatar. El experimentado goleador desperdició cuatro situaciones inmejorables. Un bombazo al palo, un cabezazo elevado, un tiro desviado y un “pechazo” sobre la línea…
El N°9 se fue masticando bronca y con los ojos vidriosos al igual que todos sus compañeros, que no encontraron los caminos al gol más allá del empuje y se despidieron tempranamente de la Copa del Mundo. Para sorpresa de todos, Marruecos terminó clasificando como líder de su zona con siete puntos, mientras que Croacia fue su escolta con cinco unidades.