Después de su salida de Colo Colo, Leonardo Gil encontró un nuevo desafío en Huracán, donde ha logrado consolidarse como pieza clave en el equipo dirigido por Frank Darío Kudelka. Su regreso al fútbol argentino no solo le permitió recuperar protagonismo, sino que también lo llevó a alcanzar una marca destacada en los clásicos.
El volante, que había llegado a Chile en 2021 y fue figura en el conjunto albo, vio reducida su participación con el paso del tiempo y, tras ser campeón en 2024, no recibió una oferta de renovación. Aunque se especuló con su continuidad en el fútbol chileno, optó por volver a su país natal y aceptar el desafío en Parque Patricios.
Con la partida de jugadores clave como Rodrigo Echeverría y Williams Alarcón, Huracán necesitaba reforzar su mediocampo. Gil y Emmanuel Ojeda, quien había quedado libre en Universidad de Chile, asumieron el reto y terminaron siendo fundamentales en la estructura del equipo. Su aporte quedó en evidencia en el último clásico ante San Lorenzo, donde el ex Colo Colo asistió en el primer gol y fue una de las figuras en el triunfo por 2-0.
Más allá de su destacada actuación, el triunfo ante el Ciclón permitió que el mediocampista mantuviera un increíble registro: jamás perdió un clásico en Argentina. Un dato que cobra aún más relevancia al considerar los duelos de alta intensidad que ha disputado en diferentes clubes.
Según datos del diario Olé, Gil jugó tres veces el clásico platense con Estudiantes, y logró dos triunfos y un empate ante Gimnasia. En su paso por Talleres de Córdoba, enfrentó dos veces a Belgrano y sumó dos igualdades. Mientras que con Rosario Central disputó el clásico rosarino en dos oportunidades y salió victorioso en am bas ocasiones frente a Newell’s.
Con el reciente triunfo con Huracán, su registro invicto en clásicos se mantiene más intacto que nunca. A sus 33 años, Gil atraviesa un gran momento en el fútbol argentino y sigue demostrando su vigencia en uno de los torneos más exigentes del continente.