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jueves, 21 noviembre 2024

Aliendro: taco genial, estadísticas top y “punto de partida” en River

El volante regaló una perlita en San Luis con una asistencia de lujo a Palavecino y fue una de las figuras. Refuerzo que ilusiona en River.

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La pisa. La duerme. Lo presionan tres rivales. Y sin ponerse nervioso, Rodrigo Aliendro mete un pase de taco magistral para el 2-0 de Agustín Palavecino ante Barracas Central, gol que empezó a meter en el bolsillo el pasaje de River a los octavos de final de la Copa Argentina.

Una belleza que no sólo iluminó la noche puntana, sino la de todo un país. Fue el golpe de confianza que necesitaba un jugador que llegó por pedido de Marcelo Gallardo, que se morfó en silencio el golpe de haber quedado afuera de la Copa Libertadores, pero que asumió con personalidad el protagonismo que le entregó el Muñeco y los hinchas lo eligieron como figura por sus estadísticas top.

“Necesitábamos un partido así, cambiar la imagen del otro día que no fue la mejor, así que este triunfo nos sirve para agarrar confianza para lo que viene”, dijo el volante, que llegó ni más ni menos que para tapar el enorme vacío que dejó la partida de Enzo Fernández. Pero desde que fichó en Núñez, el ex Colón se hizo cargo de la responsabilidad de vestir una camiseta tan importante.

Fue de menor a mayor, porque le tocó empezar su historia nada menos que con la dura eliminación en la Libertadores frente a Vélez… Aunque, según el propio mediocampista de 31 años, pese tener un inicio complicado nunca se reprochó su llegada al staff de Gallardo.

“Siempre estuve convencido de venir acá, así que estoy muy feliz de estar a la altura de esta camiseta”, agregó Rodrigo, que ante el Guapo se mostró muy activo en el medio (se asoció bien con Santiago Simón por la banda derecha), fue inteligente a la hora de los pases profundos y cada vez que encontró el espacio y la oportunidad no dudó en pisar el área rival.

Lo cierto es que River fue con todo por Aliendro. Y Gallardo le dio rodaje en la serie ante el Fortín, le otorgó un lugar dentro del equipo y, de manera progresiva en medio de la adaptación, el Mosquito va demostrando por qué llegó a un club tan importante.

En la noche de San Luis, tuvo altos momentos, como esa asistencia de taco a los 20’ del segundo tiempo, una postal para pararse y aplaudir de pie. Pero más allá de sus incursiones ofensivas, los números marcan su importancia a la hora de la marca y el equilibrio en el medio: fue el jugador que más duelos ganó (9), el que más entradas completó (6/6), sumó seis recuperaciones y tuvo una precisión en los pases del 92%.

“La verdad que desde el primer día uno se da cuenta de la calidad de jugadores que tiene River, no sólo por el juego, sino por el nivel humano. Es un grupo bárbaro y por eso quizá, hoy, me siento cómodo. Ojalá que esto sea un punto de partida”, fue el deseo Aliendro. Impecable.

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