En el marco de una gira de la Selección y disfrutando de una cena en un catamarán, recorriendo el bellísimo Lago Interlaken, en Suiza, el polifacético Víctor Hugo Morales le decía al inolvidable Néstor Ibarra: “Uds, los comentaristas, la tienen fácil, porque una cosa es “si la pelotita entra” y otra muy distinta es “si no entra”, o sea acomodan su opinión a ese hecho determinante”.
Siguiendo en la misma línea, una tardecita y cuando estaba contratado por Colón, el enorme Jorge Fosatti, café por medio, me dijo para todos los tiempos: “Si querés tener una radiografía de lo que sucedió, sacale los goles al partido”.
Dicha estás sabias premisas pregunto: Si al partido con Peñarol le sacamos el último gol, el de Farías, qué hubiese pensado el hincha rojinegro?.
Y si yo le saco los goles al encuentro tendré dos cosas en claro: Una, que el Colón de la primera parte fue brillante y la otra es que el “carbonero” oriental es una caricatura del “Campeón del Siglo”. El de Falcioni está tres goles arriba. Lamentablemente no lo pudo definir en esa primera parte. Tendrá el Cuerpo Técnico que revisar el aspecto físico. En casi todo el segundo período fue superado por esa deshilachada imagen del histórico Peñarol.
Grandes trabajos individuales de Goltz, Meza, Bernardi, del Pulga y de Facundo Farías. Bien acompañados por un tenaz Beltrán. También Burián transmitió seguridad cuando le tocó intervenir.
Colón pasó la primera experiencia copera. Ahora está sólo y mira al resto desde arriba. Es único líder en su grupo. Pero no habrá posibilidad de desconcentración. Porque esto sí es alta competencia deportiva.
En el debut estuvo a punto de dar un paso en falso. Pero lo salvó la reacción del DT al provocar los cambios que a la postre le dieron el premio mayor. Estoy seguro, porque conozco a los protagonistas, que tratarán de que los errores cometidos no vuelvan a repetirse. Y que revisarán el tema físico.
