Dos fechas tan sólo del Campeonato. Pero el hincha sabalero tendrá que olvidarse de Eduardo Domínguez porque ya es un lindo recuerdo. Y lo digo porque Falcioni, que es uno de los entrenadores más exitosos, no le encuentra la vuelta al grupo. Sabemos de lo cauteloso que es. Pero él pidió referentes de área y le dieron el gusto. Hay que esperarlo a Wanchope, pero y ¿Lucas Beltrán?.
Tiene todo para jugar con un 4-3-3 o 5-3-2 o 5-4-1, o lo que sea más cómodo a un equipo que salió campeón y que cuenta con una plantilla rica desde lo cualitativo. Lo que quedó claro en estas dos primeras fechas es que mejora cuando después de recibir goles hace los cambios.
Otro problema es que se está haciendo peligrosamente “PULGADEPENDIENTE”. Contra Boca ocurrió y ayer en el Grella también. Menos mal que enfrentó a un equipo que le manejó gran parte del juego pero que careció de eficacia. Injusto totalmente el triunfo local al término de la primera mitad. Burián colaboró para ese resultado positivo. Farías estuvo en esa etapa a la altura de sus antecedentes.
Cuando le empató de penal Ojeda reaccionó Falcioni y produjo los cambios que dieron vuelta la página. Entraron Vera y Beltrán, logrando otra imagen a partir del crecimiento de Aliendro, se soltó la figura de Colón y con su despliegue y claridad conocidos hizo funcionar al equipo que contó con las fantasías de el Pulga. Además del gol desde el córner (lo practicó), contó con la complicidad del paraguayo Espínola, porque se le escapó la pelota y sobre todo por no poner un jugador en el primer palo, se cansó de construir “caños”. Imparable. El mejor de la cancha.
180 Minutos primeros: El 4-4-2 no favorece al equipo. Sandoval no puede ser titular. Hay 3 jugadores que necesitan de un planteo para jugar y que se sientan cómodos: Rodríguez, Aliendro y Beltrán. De lo que estoy seguro es que de 6 puntos la cosecha de 4 no es para nada despreciable. Pero además “de cómo salimos? hay que preguntarse “y cómo jugamos?
Editorial de Ricardo Porta