La intención del cuerpo técnico de Colón era que Emmanuel Gigliotti sumara minutos de manera progresiva e ir llevándolo de a poco dada su falta de continuidad en el 2024.
Cuando se sumó al plantel en enero, el Puma hacía casi seis meses que no jugaba, dado que su último partido oficial había sido a fines de julio con la camiseta de Unión La Calera de Chile.
Por ello y teniendo en cuenta que en mayo cumplirá 38 años, el DT sabalero Ariel Pereyra decidió que ante Temperley ocupe un lugar en el banco de relevos, para que en caso de ser necesario sumara algunos minutos en el complemento.
Pero la lesión que sufrió Genaro Rossi a los 35′ del primer tiempo, obligó a que el Pata Pereyra acelere los tiempos mandando a la cancha al Puma
Y por lo observado en los minutos que jugó, está claro que a Gigliotti le falta aún para ponerse bien en lo físico y futbolístico. Se nota su jerarquía, pero su rendimiento fue de mayor a menor y en los minutos finales decayó su participación.
Y es lógico por todo lo mencionado anteriormente. Sabiendo que Rossi estará tres semanas afuera por el esguince en el tobillo, la realidad indica que Gigliotti tendrá que apurar su aparición en la formación titular.
En caso contrario podría ser titular el paraguayo Jorge Sanguina, quien entró faltando algunos minutos, pero que fue el último refuerzo en sumarse al plantel.
Así las cosas y con dos partidos en cinco días, ya que el miércoles 12 jugará ante San Martín de Tucumán por Copa Argentina y el lunes 17 será local ante Nueva Chicago, habrá que esperar qué decisión toma el entrenador.
Si el Puma arranca los dos partidos como titular o juega uno de arranque y en el restante va al banco de suplentes. No obstante, la lesión de Rossi está claro que es un problema para el cuerpo técnico a la hora de dosificar el esfuerzo de Gigliotti
Con información de UNO Santa Fe
