Comenzó mejor Colón, con Ríos activo (5) permitiendo sacar una renta, aunque Pablo Martínez en el poste bajo (5) fue importante para transitar el camino de la paridad. Al promediar el segmento comenzaron a llegar las rotaciones y el que terminó por sacar ventaja fue la visita, con un intratable Matías Martínez (7 puntos al hilo) para llevarse el segmento por 20 a 15.
El juego de Central, de bajarle el goleo a su rival, con Baeza manejando los tiempos le permitió siempre al equipo de Lancelotti liderar las acciones. Los Sabaleros fueron irregulares, parecieron arrancar con Ríos (9), con algo de Marín, pero siempre cometiendo errores en tomar malos tiros o tener pérdidas infantiles. En un marco de goleo bajo, Central se equivocó en las últimas dos y un bombazo de Cueva le dio la mínima ventaja a los rojinegros por 32 a 31.
El tercero también empezó con rachas de ambos. Primero Central capitalizando el buen pasaje de Banegas, pero Colón respondió con Ríos (17). A 3’ del final, en un juego con mucho roce y fricción, el conjunto ceresino sacó provecho de una técnica a Zulberti para escaparse 51-46. Banegas (15) y Martínez (15) condensaban cada ofensiva. Después del tiempo muerto de De Cecco, el juego estuvo muy detenido por infracciones y faltas técnicas, pero Central se lo llevó 57-54.
El último cuarto contó con todos los condimentos: emoción, yerros, tensión. Central con Matías Martínez como eje siempre lo manejó, más aún con el regreso de Baeza que clavó una bomba. Pero fue Marín, a falta de abuso del tiro de tres, quien contagió con una ráfaga. A 2’ del cierre, Central ganaba 73-70 y con dos libres para su artillero. En el regreso tras un tiempo muerto, lo selló Baeza con otro triple fabuloso para desatar el festejo en el Otrino.