El comienzo del partido fue favorable a la visita, que aprovechando las cortinas y aperturas al perímetro anotó algunos lanzamientos a distancia que lo colocaron casi todo el parcial arriba en el marcador. Con el correr de los minutos, Unión se fue acomodando en cancha. Importantísimo los aportes de Ignacio Alessio con ocho puntos en este cuarto para mantener a su equipo en juego.
Sobre el final del periodo, las rotaciones de las bancas le dieron el efecto esperado al Tatengue que con un triple de Bolívar se fue en ganancia al primer descanso.
El segundo cuarto fue más cortado. Ya que si bien en el comienzo del mismo Unión tomó una luz de ventaja; el conjunto Milrayitas levantó promediando el parcial y tomó el control de la bola.
En el golpe por golpe el elenco marplatense tuvo mayor concentración para resolver las jugadas de laboratorio. Con variantes para atacar, se puso arriba en el luminoso y manejó con criterio el desarrollo del parcial. Unión no supo cómo oponerse a la verticalidad marplatense y en ataque estuvo un tanto enredado para resolver y no logró tomar el control de la americana.
De regreso al rectángulo de juego el descanso le sentó mejor al conjunto visitante. Ya que realizó ajustes defensivos, lo secó en ataque al Rojiblanco, y en ataque apareció en escena Willie Thornton que comenzó a anotar y además exigió cuando sus compañeros tuvieron la bola en las manos. Un parcial dominado con claridad por Peñarol que conquistó una buena distancia en el marcador de cara el final del partido.
En el epílogo no varió demasiado el desenlace del juego. Peñarol con la ventaja en su favor la utilizó para pensar cuando atacar y como lastimar la permeable defensa local; mientras que Unión mejoró en ofensiva, aunque sufrió la efectividad de la visita en cada ataque
