Fue un partido muy chato, sin emociones, casi sin jugadas de riesgo. En los comienzos de cada tiempo, parecía que se armaba el partido. Pero con el paso del tiempo, las ilusiones desaparecían y todo quedaba en la nada.
En la primera parte solo queda rescatar una mano de Fontanini en la propia área, que debió haber sido sancionada como penal. Pero Jorge Broggi decidió que no era necesaria la pena máxima
El complemento fue mucho más emotivo que la primera etapa. Fontanini, nuevamente como protagonista, hizo revolcar al arquero local y Bravo no pudo meterla en el rebote. A los 8 fue Luna, el que generó su oportunidad. Y para el local, Gorosito tuvo lo suyo a los 16. Después, la nada misma.
Sobre el final, a los 40, Arévalo vio la roja directa por una fuerte infracción. Quizás podría haber sido amarilla, pero recibió la expulsión de forma directa.
La Crema sigue dejando puntos importantes en el camino. Si bien sirve siempre empatar de visitante y más después de perder dos partidos seguidos, en este caso, la igualdad lo deja más lejos del lote de los que pelean por la clasificación a la final por el ascenso.