Los pronósticos del Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) correspondiente a mayo muestra un dramático salto negativo en la visión de las consultoras que releva el Banco Central. Para el año calendario 2023, los analistas esperan una inflación de 148,9%, lo que implica una suba de 22,5 puntos porcentuales (p.p.) en relación a la encuesta del mes anterior. También se elevaron fuerte las estimaciones para los próximos 12 meses, que se ubicaron en 171,1%, lo que marca un alza de 24,6 p.p. en relación a abril.
Para el IPC de junio, los pronosticadores aguardan un 9%, por encima del 8,4% de abril. El dato oficial para el mes pasado será informado por el INDEC el próximo miércoles 14. De confirmarse el pronóstico de los especialistas, será el sexto mes consecutivo con aceleración de los incrementos de precios.
En lo que respecta a los meses posteriores, los especialistas consultados por el BCRA prevén, por el momento, una desaceleración de la inflación mensual, aunque en todos los casos el pronóstico empeoró en relación a lo proyectado en las encuestas anteriores. En junio, por ejemplo, se anticipaba que el IPC avanzaría 7%, pero en esta nuevo edición del REM ya se habla de un 8% para el mes en curso.
El empeoramiento de las expectativas inflacionarias se viene dando desde hace tiempo, pero se hizo mucho más evidente en los relevamientos de marzo, abril y mayo. Si se toma como referencia el pronóstico del IPC para los próximos doce meses (en este caso de mayo de 2023 a igual mes de 2024), se nota una clara tendencia alcista.
Hasta enero aún era posible ver pronósticos anuales por debajo de los tres dígitos en la estimación para los siguientes 12 meses, pero en marzo ascendió al 113,3% y dos meses más tarde, en la edición publicada esta tarde por el Banco Central, esa expectativa llegó al 171,1%.
Es importante recordar que en los primeros meses del año se aceleró el proceso inflacionario y en abril se produjo una fuerte suba del dólar libre (pasó de $390 a $490 en días), que fue acompañada por el aumento de la cotización MEP y el contado con liquidación. Todo eso contribuyó al empeoramiento de las expectativas en relación a los precios.
Mucho tuvo que ver también el resultado del IPC de abril, mes en el que los datos oficiales mostraron una aceleración de algunos rubros claves en la medición, como los alimentos y bebidas, que tuvieron una variación mensual del 10,1%.
De todas formas, en vistas a los próximos años el REM parece esperar un plan económico que logre desacelerar las subas de precios. Para todo el 2024 se espera una variación del IPC del 105,7%, valor que se ubica 1,8 puntos por debajo de la expectativa que se mantenía para ese período en la encuesta de abril.
Para un año más tarde, el 2025, se espera que la inflación ronde el 56,7% (el mes pasado se hablaba de 55,5%). Por tanto, los especialistas anticipan que el IPC anual podría bajar casi 100 puntos en el transcurso de dos años.
Por supuesto que se trata solo de expectativas y luego los números pueden resultar luego diferentes a los pronosticados. Sin ir más lejos, en octubre del año pasado el REM anticipaba que el IPC anual superaría levemente el 100%, pero, de acuerdo a las estadísticas oficiales, terminó cerrando el 2023 en 94,8%.
Qué se espera para el dólar
Como se mencionó, la cotización del dólar es un factor clave en los pronósticos inflacionarios, pero los especialistas consultados por el Banco Central también compartieron sus pronósticos respecto a cómo evolucionará el tipo de cambio oficial en los próximos meses.
En ese caso, las expectativas muestran que se espera un tipo de cambio más bajo a finales de junio que el que se proyectaba hace un mes ($248,11 contra $246,93 del informe anterior).
La misma situación se observa en julio, pero para los meses siguientes, las proyecciones ahora son mayores. Además, se espera que el 2023 cierre en $408,68 por dólar ($10,18 más que en el estudio previo). Es la primera vez que se pronostica un valor para 2023 por encima de la barrera de $400 en el REM.
Asimismo, aumentó en $55,04 la proyección de cómo estará el tipo de cambio en diciembre de 2024. Según los expertos, el año que viene el dólar oficial cerraría en torno a los $917,54.
La actividad económica
Entre las diferentes variables que se miden en el Relevamiento de Expectativas de Mercado, una de las que menor cambio presentó en el informe de mayo fue el de actividad económica, aunque esa no es necesariamente una buena noticia. Las consultoras, economistas, empresas e instituciones proyectan que el Producto Interno Bruto (PIB) caerá 3% este año. Si bien es una proyección 0,1 puntos porcentuales mejor a la que se arrojó el mes pasado, no deja de ser un dato negativo.
En contraparte, empeoró 0,1 puntos el pronóstico para el 2024, que da un valor negativo del 0,3. Para los especialistas, la recuperación económica, después del golpe de la sequía, llegaría recién en 2025, con un crecimiento del PIB del 2,7%.