Uno de los aspectos centrales del documento presentado la semana pasada por Moreno, es el correspondiente a la venta del 16,6% del capital de Renova por parte de Vicentin a una empresa controlada por Viterra por un monto de 122,7 millones de dólares.
La imputación considera que Daniel Néstor Buyatti (ex presidente de Vicentin), Alberto Julián Macua (ex vicepresidente), Roberto Alejandro Gazze, Máximo Javier Padoán, Cristián Andrés Padoán, Martín Sebastián Colombo, Sergio Roberto Vicentin, Pedro Germán Vicentin, Roberto Oscar Vicentin y Yanina Colomba Boschi (ex directores) violaron sus deberes de administradores y quebrantaron el deber de cuidado del patrimonio de la empresa al permitir la venta del 16,6% de Renova el 3 de diciembre de 2019, es decir, un día antes de declarar el estrés financiero (default) de Vicentin.
Los integrantes del directorio dispusieron que se concluya la negociación y se concrete la operación de venta y transferencia a Renaisco BV del 100% de las acciones que Vicentin SAIC sucursal Uruguay tenía sobre la empresa Renova S.A.
“Cabe destacar que Daniel Néstor Buyatti se desempeñaba en ese momento como presidente de Vicentin y al mismo tiempo era director de Renova; Sergio Manuel Nardelli era director de Vicentin y a la vez era presidente de Renova. En tanto que Máximo Javier Padoán era simultáneamente director en Vicentin y director suplente en Renova”, destaca el escrito.
Esa operación, entiende el fiscal Moreno, “se caracterizó por la falta de transparencia y por ser contraria a conservar o mejorar la situación patrimonial de la empresa”, además de perjudicar “la posibilidad de negociación con los eventuales acreedores que se presentarían a verificar sus créditos en el concurso preventivo, con el peligro concreto de conducir a Vicentin a una futura quiebra y el perjuicio que ello conllevaría a la sociedad y sus socios”.
Otro aspecto que se destaca en el documento es que la venta se realizó a un socio comercial de Vicentin, dado que la empresa Renaisco pertenecía al entonces llamado grupo Glencore (actualmente Viterra).
“Resulta inverosímil que el mismo día en que el Directorio refiere que las negociaciones de la venta de acciones de Renova se encuentran avanzadas, y que autorizan la suscripción de la oferta, el precio de compra y la forma de pago en los términos del borrador, simultáneamente Vicentin contrae un préstamo de 10 millones de dólares con Oleaginosa Moreno, empresa controlada por Glencore”, señala el documento. Un dato importante es que los auditores forenses refirieron no haber tenido acceso al documento vinculado a dicho préstamo.
En referencia al supuesto crédito de 10 millones de dólares otorgado a Vicentin, la imputación señala que “no se advierte si ese dinero ingresó a Vicentin; en el caso de haber ingresado, no se advierte qué utilización se le dio ni el motivo por el cuál fue adquirido a cinco días de declarar su estrés financiero y a cuatro días de vender el activo más importante de la firma”.
El documento también señala que Vicentin transfirió a fines de 2019 una suma de 604,84 millones de pesos a Oleaginosa Moreno en concepto de cancelación del supuesto préstamo, por lo que considera que el “fin último de la operación fue sacar 604,84 millones de pesos de las arcas de Vicentin, y su beneficiario final resultó ser una empresa del grupo Glencore, que a través de Renaisco estaba comprando las acciones de Renova”.
Otra inconsistencia descubierta por la investigación del fiscal es que el 2 de diciembre de 2019 Renaisco transfirió la suma de 30 millones de dólares, en concepto de primer pago, aceptando la oferta realizada por Vicentin por su participación en Renova, pero el acta de aprobación por parte del Directorio de Vicentin para que se concluya la negociación y se concrete la operación de venta y transferencia ocurrió el 3 de diciembre de 2019.
Fuente: Bichos de Campo