El Gobierno oficializó este jueves, a través del Boletín Oficial, el nacimiento de “Corporación 2030″, una asociación privada sin fines de lucro para que el país pueda presentarse como sede para el Mundial de Fútbol de ese año, junto a Paraguay, Uruguay y Chile.
La constitución de “Corporación 2030″ quedó establecida a través del decreto 754 firmado por Alberto Fernández. La medida representa un paso legal establecido por la Federación Internacional de Fútbol (FIFA) como requisito para considerar las propuestas de las sedes para la competencia, que se realiza cada cuatro años.
A través del decreto, el Gobierno autorizó al Ministerio de Turismo y Deportes a constituir, junto a los otros tres países, la “asociación de derecho privado, sin fines de lucro”. La organización supranacional, que tendrá como fin pelear la candidatura para el Mundial, funcionará en Santiago de Chile.
A partir del decreto, el Ministerio de Turismo y Deportes, a cargo de Matías Lammens, quedó facultado para suscribir el estatuto e integrar los “distintos cuerpos orgánicos” que se establezcan para su funcionamiento. También realizará el aporte económico necesario para el desenvolvimiento.
La ratificación de Argentina de la “Corporación 2030″ tiene lugar a días de que inicie el Mundial de Fútbol en Qatar y apenas un puñado de meses antes de que la FIFA defina la sede para la Copa Mundial que se desarrollará dentro de ocho años. La organización internacional lo resolverá en 2024.
Los países sudamericanos tienen fuertes competidores. España, Portugal y Ucrania -que se sumó recientemente en el contexto de la invasión rusa- también se han propuesto como sede para el Mundial de 2030.
Por lo pronto, después de Qatar, la FIFA ya definió que el Mundial 2026 se desarrolla en Estados Unidos, México y Canadá. Según el Gobierno, los “consorcios de países serán la regla en los sucesivos eventos” al momento de presentar candidaturas para las sedes.
Argumentos
Originalmente, Argentina y Uruguay se habían postulado como sede del Mundial. El principal motivo era la celebración del centenario de la primera competencia internacional de este deporte que se cumplirá en 2030. Uruguay fue campeón en 1930, mientras que Argentina fue subcampeón.
En las sucesivas negociaciones se incorporó Paraguay, y más tarde Chile. “Las presentaciones conjuntas de sedes permiten distribuir los costos y riesgos del evento entre los países miembros”, se señala en el decreto del Gobierno argentino de este jueves.
Además, la norma sostiene que la organización conjunta de un evento de estas características mejora “el atractivo turístico y deportivo de dicho acontecimiento al presentar una oferta más amplia que también favorece la integración regional y la cooperación entre naciones para futuros proyectos”.
En suma, también se destaca la importancia de organizar la competencia. “Ser país anfitrión de un evento como la Copa del Mundo permite movilizar recursos públicos y privados para la readecuación de la infraestructura turística y deportiva, la cual trasciende el evento y se transforma en un activo en beneficio de la sociedad toda”, se afirma.
A su vez, se señala que los países anfitriones “se benefician con la mayor afluencia de turistas del extranjero y la promoción internacional, conllevando a un crecimiento del turismo receptivo a largo plazo e induciendo a nuevas inversiones en ese sector”.