Colón no atraviesa un buen presente en el Torneo de la Liga Profesional y por ello el plantel ha tenido que sufrir encontronazos con la barrabrava en su propio predio. En medio de este complicadísimo contexto, Luis Miguel Rodríguez tomó una decisión acerca de su futuro: se va del Sabalero.
La decisión final fue en conjunto con su familia, y la escena que ocurrió el pasado martes, fueron el detonante para que el futbolista de 37 años diga que no seguirá en el club de barrio Centenario.
A esto se le sumó la declaración del propio representante, Roberto San Juan, sentenciando con lo siguiente: "Termina el campeonato y el Pulga se va. Ya está, no hay vuelta atrás. El club es el principal responsable de todo".
Todavía debe cumplir contrato, por lo que se deberán definir aspectos contractuales en el futuro próximo si el jugador no quiere seguir en Colón.