Con fundamento en la inflación y la proyección de una posible devaluación mayor del tipo de cambio, YPF anunció desde este domingo un nuevo aumento de combustibles.
Teniendo un incremento promedio de 7,5%, tendrá mayor incidencia en naftas con un 8,5% entre súper y premium. Mientras que en el gasoil es de 6%, entre el tipo grado 2 y grado 3.
Ante la implementación de nuevos precios en sus productos, la empresa aclaró que “YPF continuará realizando sus mayores esfuerzos productivos y logísticos para sostener el abastecimiento en el mercado nacional en un contexto de sostenidos récords históricos de demanda”.
Debido a que los factores que inciden en la formación de precios de combustible continúan en aumento, desde la compañía se aclaró que “luego de este ajuste continuaremos monitoreando la evolución de las variables”.
El último aumento de combustibles que se implementó en la ciudad de Santa Fe se produjo en el mes de junio del corriente año. En ese momento la suma promedio fue del 12%.
A nivel nacional, fue en mayo y desde YPF habían explicado que la decisión se tomó a partir de: la evolución de los costos asociados a la refinación y comercialización; el incremento de los precios locales de biocombustibles producido por terceros y que los comercializadores deben adquirir a precio regulado; y el sostenido aumento de los precios internacionales de los combustibles que es necesario importar para complementar la refinación local.
El incremento en los últimos 12 meses aplicado por la empresa petrolera asciende a 41,7%. La variación se encuentra por debajo de la evolución presentada por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) y de los precios relativos de la economía, remarcaron fuentes ligadas al sector.
El biodiesel por su parte, incrementó su precio en 6,7% desde el último aumento del gasoil efectuado el 16 de junio y la devaluación acumulada es del 10,5% desde entonces.
Fuente: El Litoral
