Una situación que generó mucha angustia se produjo a los siete minutos del segundo tiempo del partido entre Lanús y Aldosivi, en la Fortaleza. Ivan Cazal, delantero del Granate, e Ian Escobar, defensor del Tiburón, chocaron fuerte sus cabezas en la búsqueda de una pelota aérea. El futbolista del equipo marplatense la pasó muy mal: convulsionó por el impacto. Hubo gestos de desesperación de sus compañeros. Sobre todo en el Tanque Silva, que se tapaba la cara.
A Escobar le pusieron un cuello ortopédico y se lo llevaron en ambulancia a un hospital, mientras que Cazal debió ser vendado, aunque hizo muchos gestos de dolor y de preocupación. Fernando Román ingresó por el jugador afectado.
A la espera del parte médico, informaron que Escobar está fuera de peligro y consciente, en el hospital al que fue trasladado.
El partido, que iba 0 a 0 en el momento del choque, se reanudó 16 minutos después, ya con otra ambulancia en la cancha. Ya en ese momento los futbolistas estaban más tranquilos, con el dato de que Escobar, ex Talleres de Córdoba, estaba recuperado.