Hasta que un día por fin se le dio a Central Córdoba. Y se le dio en un partido clave, contra Sarmiento, un rival directo en la futura lucha por mantener la categoría, ahora extinta por la pandemia pero presente implícitamente porque este torneo cuenta para los promedios que, a finales de 2022, definirán quiénes se van y quiénes se quedan. En ese contexto es un triunfazo el que se llevó el Ferroviario del estadio Eva Perón de Junín, donde ganó por 3-1 con goles de Riaño, Giménez y Gallo y enterró la racha de ocho partidos al hilo sin victorias (5PP y 3PE), además de escapar del último lugar de la tabla de posiciones del torneo de la Liga Profesional de Fútbol.
La del contragolpe es la receta que utilizó el equipo de Rondina para hacer la diferencia. Dos respuestas letales, al final del primer tiempo y en el primer cuarto del segundo, encaminaron a Central Córdoba hacia un triunfo que solamente se vio comprometido en los minutos finales del partido, luego de que Torres descontara y antes de que Gallo la empujara a la red para bajarle definitivamente la persiana al encuentro.
La victoria bien podría ser un nuevo despertar para el Ferroviario, que necesita sumar de cara a lo que seguramente será una pelea despiadada por evitar el descenso. Mientras que el local, algo mejor en los promedios pero con los mismos problemas futbolístico que su rival de turno, pese a que se encuentre más arriba en la tabla, deberá buscar la regularidad que no tiene ni tuvo en todo el campeonato.
Falta mucho todavía para entrar en la etapa decisiva pero a no dormirse que el tiempo no para…
