En la tarde del domingo, se vivió una jornada de terror en el Federal A. En Mendoza, Huracán Las Heras derrotaba 3-1 a Ferro de General Pico cuando, desde la popular local, comenzó un enfrentamiento de barras bravas que terminó a los tiros y una bala impacto en Mauricio Romero, entrenador del elenco de La Pampa. Por suerte dio en el hombro y su vida no corre riesgo.
"Uno va a jugar un partido de fútbol y te encontrás con un contexto que jamás pensás que vas a ver. Gracias a dios no tuvimos una situación fatal, podía haber pasado una desgracia", contó el DT en una entrevista con Radio La Red. "Escuchamos disparos, en principio fue confuso, uno imagina que era pirotecnia, pero cuando vimos corridas en las tribunas del local entendimos que era grave. Había barras entrando al campo de juego, el árbitro paró el partido. Más disparos, se escucharon muchas detonaciones, no nos dio tiempo a correr, sentíamos el zumbido de las balas. En el banco nuestro había dos impactos de bala, fue aterrador", agregó más tarde.
Por otro lado, Romero, quien fue jugador de las Selecciones Juveniles y tuvo pasos por Colón y Lanús, entre otros, retrató el momento en el que siente el disparo. "Temor, angustia, tuve suerte… Cuando empezaron los disparos siento un impacto en la zona de la axila, entré en pánico, me toqué, me di cuenta de que no había pasado a mayores y nos metimos a los túneles. Asustado, angustiado por lo que pasó, pero lo puedo contar", aseveró. "Es angustiante que sigan pasando estas cosas en el fútbol argentino, no se terminan de erradicar estas mafias. Da mucha pena la situación que vive el país en general, que tengamos que esperar a que pase algo grave para que se tomen decisiones", añadió, y reveló que no sabe si seguirá dirigiendo. "No es fácil ser entrenador, te encontrás con estas cosas que te hacen replantear todo. Yo estaba en un momento de análisis y me tomaré el tiempo para pensar qué es lo que quiero hacer", concluyó.
Fuente: TyC Sports