Aprobadas la ley bases y el paquete fiscal, el Gobierno encara una nueva etapa. Para esto, necesita conseguir apoyos políticos. Por eso, su próxima parada en la hoja de ruta es el Pacto de Mayo, devenido en Pacto de julio.
A través de un comunicado oficial, la Oficina de la Presidencia reafirmó su convocatoria a gobernadores y referentes políticos “que quieran acompañar el proceso de cambio” para “eliminar del futuro de la Argentina las recetas de la miseria y abrazar las ideas de la libertad, comprometiéndose en la firma histórica del Pacto de Mayo con diez políticas refundacionales y fundamentales para devolverle la grandeza a la Nación”.
De qué trata el Pacto
El Pacto de Mayo original había sido convocado durante la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso por Javier Milei. Se trataba de un tratado de 10 puntos para “redundar” el país y se invitaba a los gobernadores a firmarlo en Córdoba durante el aniversario de la Revolución de Mayo.
La dilación en la aprobación de la ley bases no solo aplazó el encuentro —previsto para julio en Tucumán, cuna de la independencia argentina— sino que, en el medio, y en busca de sumar apoyos, el Ejecutivo modificó ese decálogo.
El nuevo texto pasó a llamarse Acta de Mayo. Y sumó un área que había sido reclamada por buena parte del arco político: la educación.
Por eso, se agregó un punto para avanzar en “una educación inicial, primaria y secundaria útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar”. Para mantener en diez los puntos, se eliminó un artículo resistido por algunos dirigentes provinciales, que promovía una “reforma política”.
Además, el acta invita a crear el Consejo de Mayo, anunciado por Milei en Córdoba el 25/05. Este organismo estaría integrado por "un Presidente del Consejo de Mayo, por un representante del Poder Ejecutivo Nacional, un representante de la Cámara de Diputados, un representante del Senado, un representante de las provincias, un representante de las entidades gremiales y un representante del sector empresarial".
Todo indica que el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, será el representante del Ejecutivo.
Aunque no fue confirmado oficialmente, se especula que el encuentro en Tucumán sea el 8 de julio por la noche. ¿Por qué no el 9? La intención es darle épica con un acto nocturno, y ese 9 de julio la Selección Argentina podría jugar las semifinales de la Copa América, lo que quitaría protagonismo al evento político.
Apoyos y rechazos
Desde que se anunció la intención de firmar un pacto entre gobernadores en julio, algunos mandatarios ratificaron que acompañarán la invitación.
Uno de los primeros en manifestarse fue el gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro, durante la visita de Milei a Rosario en el marco del último Día de la Bandera. También ratificó su apoyo Martín Llaryora (Córdoba): “Hay que ser parte de la solución”.
El anfitrión, Osvaldo Jaldo (Tucumán), es otro de los que ya hizo público en varias ocasiones su respaldo al presidente. Mientras que en las últimas semanas se sumó el apoyo del peronista Raúl Jalil (Catamarca), algo que se evidenció por cómo votaron los diputados de esa provincia sobre el impuesto a las ganancias en Diputados (tres a favor y una abstención).
El que ya adelantó que no estará en Tucumán es el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. “Si es una foto de marketing del Gobierno para fingir un apoyo que no tiene, no cuenten conmigo", dijo el dirigente de Unión por la Patria.